"¿Me pueden mandar un móvil?", pidió Hernán Rado, el hijo del corazón de Tristán Díaz Ocampo, que hizo la denuncia a la policía para pedir ayuda después de que el humorista protagonizara una confusa pelea con su otro hijo Federico.
"Mi padre es un hombre de 82 años, se encerró en el departamento, a mi hermano lo acaba de apuntar con un arma y lo quiso tirar de un décimo piso. Tenemos miedo porque se va a prender fuego todo. Él no va a salir. Se atrincheró en su casa", agregó el joven en el llamado al 911 que difundió esta mañana Buenos días América.
En la denuncia, detalló que Tristán estaba "sacado", que tenía un arma y que amenazó a su hijo con tirarlo desde el décimo piso del departamento de Recoleta en el que vive. "Él no puede estar solo. Yo vengo y tampoco puedo entrar".
"Se atrincheró, le apuntó a mi hermano y lo quiso tirar por el balcón. Tuvo una crisis, mi hermano vino a buscarme a mí. Yo vengo y está encerrado hace horas. Tenemos miedo de que haya hecho algo o que pueda prender fuego el departamento", ratificó Rado, que es hijo del corazón de Tristán.
La pelea entre Tristán y su hijo Federico fue en la madrugada de este martes. El joven se fue a dormir a la casa de su madre y por la mañana quiso regresar al departamento de su padre pero no lo logró, por eso lo llamó a su hermano para que lo ayudara.
Al ver que el humorista no abría la puerta, decidieron llamar primero al SAME y luego a la Policía para hacer la denuncia. Pasadas las 10 de la mañana, fue trasladado al hospital Fernández. "Estoy bien", dijo frente a las cámaras mientras subía a la ambulancia.
"Tuve un pequeño altercado con mi hijo, son problemas familiares", dijo el cómico en referencia a la discusión que tuvo con su hijo menor, Federico Díaz Ocampo. "Él decidió irse a la casa de la mamá que vive en la calle Alsina con el otro hermano".
Cuando le preguntaron al humorista si sufría de Alzheimer, contestó en tono irónico: "¿Alzheimer? No. Yo conozco a un Alzheimer que vive cerca de Pergamino. Cuando voy, lo atiendo".
Además, aseguró que no se atrincheró en su departamento ni amenazó a su hijo con un arma. "No tengo armas. Acaba de revisar (el lugar) el personal de Policía". Antes de cortar la comunicación, señaló con humor: "Me está buscando la doctora, perdóneme, pero prefiero las mujeres antes que los hombres".
El humorista no fue el único que minimizó el episodio. En diálogo con Nosotros a la mañana, Federico declaró: "Fue un susto porque pensamos que le había pasado algo… Por protocolo, llamé a la Policía, los Bomberos y el SAME para que me abriera la puerta".
