"Roger Waters es un agitador espiritual para el que no hay sitio en nuestra ciudad", dijo Michael Szentei-Heise, director de la comunidad judía de Düsseldorf, ante el concierto que el músico de 69 años ofrecerá el 6 de septiembre en la ciudad del oeste alemán.
En su tercer año de gira por Europa con "The Wall", Waters tocó ya hace menos de un mes ante 30.000 personas en Fráncfort. La comunidad judía crítica sobre todo que en el espectáculo aparezca volando un cerdo inflable que tiene entre otros símbolos la estrella de David.
"El escenario entero despierta asociaciones inequívocas a los congresos del partido en el Tercer Reich y a la propaganda del NSDAP (el partido de Adolf Hitler)", denunció Szentei-Heise.
Waters lleva además un abrigo de cuero con un brazalete negro y rojo, añadió. "Da miedo que decenas de miles de personas vayan a un acto así para bailar, aplaudir y celebrar a Roger Waters pese a la simbología antisemita y nacionalsocialista".
El show ya irritó a la comunidad judía en Bélgica. Waters se defendió entonces a principios de agosto con una carta en la que rechaza de plano las acusaciones. También la Liga Antidifamación Estadounidense dijo no ver ninguna intención antisemita en la gira.
El legendario músico recordó que en el show utiliza también otros símbolos como un crucifijo, la hoz y el martillo o logos de empresas. Además aseguró que tiene muchos amigos judíos, que su nuera es judía y que su padre murió en 1944 combatiendo con las tropas británicas contra los nazis en Italia.
"The Wall" está pensado como crítica a la guerra y al fascismo, añadió. El cerdo inflable apareció ya en casi 200 shows desde 2010.
Cabe recordar, que hace una semana Waters llamó a su "familia del rock and roll" a boicotear a Israel por la constante violación de los derechos humanos y agregó que lleva siete años formando parte de la campaña Desinversión y Sanciones contra el sistema del país de Medio Oriente.
