El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria informó que el animal (del cual no se precisó la zona de la provincia de la que procedía) fue diagnosticado luego de un control serológico, debido a que se había vencido la libreta sanitaria durante su estadía en el establecimiento. Una vez practicado el sacrificio, el mismo organismo determinó el cierre preventivo del sector donde estuvo alojado e indicó el muestreo de todos los caballos expuestos, con el objetivo de descartar que se haya transmitido la enfermedad.
La medida involucra a una centena de equinos que se encuentran alojados en el sector, los cuales no podrán ser trasladados fuera del lugar hasta tanto se culmine con el proceso de saneamiento, que consiste en una serie de diagnósticos que permitan descartar la presencia del virus causal de la anemia en todos los animales expuestos. Durante ese tiempo, podrán participar de las competencias en el hipódromo, pero no podrán ser trasladados ni competir en otro lugar.
Asimismo, se establecieron medidas de control y prevención dentro del hipódromo, a fin de controlar la enfermedad y evitar su dispersión, como la fumigación cada 48 horas para controlar a los insectos vectores que causan la enfermedad y el examen intensivo de los animales expuestos.
La anemia infecciosa es una enfermedad que afecta a los equinos y se transmite a través de la picadura de algunos insectos y de cualquier objeto punzante que contenga sangre de un caballo enfermo. En tanto, es de baja diseminación y no es una zoonosis, es decir, no existe la posibilidad de transmisión del virus a las personas.
