Entre otras cosas, en la respuesta, el supuesto empleador solicitó documentación específica y anunció lo que sería el sueldo básico del que obtuviera el puesto de trabajo. Además, explicó que de manera opcional podrían abonarse los costos de los trámites para ser realizados por un administrativo particular.
Una vez confirmado el interés, desde la supuesta organización brindarían una dirección para realizar una entrevista de trabajo tras confirmar el depósito de dinero. Sin embargo, el domicilio mencionado no era verdadero.