"No he ido a la reunión, estoy en mi casa y estoy desinformado de todo", dijo desde su domicilio de Mar del Plata el hermano del concordiense Fernando Mendoza, teniente de navío del submarino que no aparece hace casi tres meses.
"No estoy enojado ni nada. Como nos dijo el ministro Aguad el otro día, 'lo están buscando, con la mala suerte que no aparece'", sostuvo el hombre.
Acerca de la reunión con Macri, indicó: "La verdad que se me complicó ir. Quise, pero no me puedo ir a ningún lado porque estoy cuidando un departamento vacío que tengo para alquilar, por si viene alguien". "Justo ayer tuve la suerte de que entró gente y cuando me decidí a asistir, fui a la Base a preguntar bien cómo era el tema y ya se había ido el colectivo".
Carlos Mendoza manifestó también: "¿Por qué no voy a la reunión? Porque yo fui a la que tuvimos acá en la base con el ministro -Oscar- Aguad y había familiares que no se resignan a que no aparece el submarino, entonces como que buscamos culpables", consideró.
En ese sentido, señaló: "El mar es infinito, profundo, es un abismo gigante, yo siempre lo digo porque trabajo en los barcos pesqueros y sé lo que es. La gente a veces no entiende que el mar no es una laguna, donde vos vas y lo encontrás. No es así, es difícil encontrar un submarino, es gigante el mar". "La gente no está conforme, dice que no lo están buscando y no sé qué es lo que esperan que haga el presidente Macri", dijo.
"Algunos dicen que mientras Macri está jugando a la pelota, el submarino sigue perdido, pero la realidad es la siguiente, como nos dijo el ministro: '¿Ustedes qué se piensan, que todos los barcos y submarinos que han venido vinieron por arte de magia? No señores, la gente que vino fue porque el presidente Macri se movió, llamó a todas partes del mundo y han venido a buscarlo, pero con la mala suerte de que no se lo encuentra", reveló.
Sobre las probabilidades de hallar a los tripulantes con vida
El hermano del tripulante entrerriano del ARA San Juan también expresó: "Yo tenía entendido que ese submarino está capacitado para estar debajo del agua 15 o 20 días en condiciones normales, pero ya pasando los 20 días es imposible que estén con vida, únicamente que ocurra un milagro de Dios".
Acerca de la posibilidad de se puedan llegar a hallar los restos del submarino, que desapareció el 15 de noviembre de 2017, Carlos Mendoza dijo: "Depende de cómo haya sido la explosión, si es que hubo una explosión".
