A la par, se escucha la voz de quienes sostienen que estos animales sobrellevan con normalidad las altas temperaturas.
Buscando la respuesta de un profesional, consultamos al Dr. Tristán Gerlero (M. P. 1239), quien además de ejercer en forma privada, está a cargo del área de Zoonosis de la Municipalidad de Colón.
“Hasta 37°-38° los caballos controlan bien su temperatura, ya que –a diferencia de los perros- tienen un buen sistema de termorregulación, sudan bien”.
“Cuando esta temperatura se supera, como ocurre estos días, necesitamos dos cosas: que el animal esté en reposo –atado o suelto- buscando su estado de tranquilidad, en lo posible a la sombra; y que tenga acceso al agua, preferentemente fresca. Lo ideal sería que tuviese sombra y agua a la hora de la siesta”.
En cuanto a la ingesta de líquido, “suelen tomar agua una vez por día, pero cuando las condiciones ambientales son desfavorables eso varía”.
“Para un animal adulto, que pesa aproximadamente 450-500 kilos, se consideran 25-30 litros diarios. Pero a medida que aumentan la temperatura o el movimiento necesitan más, llegando más o menos a los 50 litros”, explica el veterinario.
Concientizar más que denunciar
En el Centro de Atención al Vecino de la municipalidad (CAV) se reciben reclamos y consultas, de lunes a viernes de 7 a 18 y los sábados de 8 a 13, por whatsapp (3447 497175 / 497155 / 641295) o al teléfono fijo 426000.“Si está en un ámbito privado el municipio no tiene injerencia; si el animal está suelto, sí. De cualquier forma, nosotros nos acercamos a hablar con los dueños e intentamos concientizar”, señala el responsable de Zoonosis.
Si bien hay una ley de Maltrato Animal, que permite denunciar en sede policial cualquier situación que pueda constituir un delito, el Dr. Tristán Gerlero hace hincapié en la importancia de educar a quien tiene animales a su cargo y al diálogo entre vecinos.
“Esto se trata con educación, como pasa con la gente que tiene a los perros atados. La mayoría quiere a sus animales y responde”.
A la vez, recomienda: “Si como vecinos vemos un caballo expuesto al calor o al que le puede estar faltando agua, en vez de denunciar pensemos cómo ayudar. Probemos hablar con el responsable, sugerirle que lo ponga a la sombra o preguntarle si le podemos dar agua cuando él está trabajando”.
