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Este martes por la mañana, representantes de la delegación Concordia de la CTA, de AGMER, de ATE, SIGURA, de Camioneros, de SADOP, de la CCC y Merenderos Barrios de Pie Libres del Sur presentaron, en forma conjunta, un petitorio ante la Secretaría del Departamento Ejecutivo Municipal, dirigido al intendente Alfredo Francolini, solicitando la constitución de un Comité de Crisis, “con el propósito de discutir los múltiples problemas suscitados por la pandemia”.

La nota fue entregada por secretarios generales, representantes de Delegaciones y coordinadores de las organizaciones firmantes y recibida formalmente por la secretaria del jefe comunal.
¿Qué dice la carta?
Con el propósito de discutir los múltiples problemas suscitados por la pandemia, solicitamos al Gobierno municipal que nos convoque a conformar un comité de crisis para el Departamento Concordia que atienda las urgencias sociales y económicas. Tenemos mucho para decir y aportar sobre las dificultades que enfrentan a diario los concordienses.

En este contexto de crisis, el gobierno de Alberto Fernández tomó medidas para afrontar la emergencia sanitaria como problema principal, instruyendo en todo el territorio nacional el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio desde el 12 de marzo. Su efectividad, en comparación con otros países de la región y del mundo, proporciona por el momento datos positivos.

Al mismo tiempo, la emergencia sanitaria puso al desnudo las desigualdades del país, cuyos principales perjudicados son los que hace décadas conforman el esquema de pobreza estructural. Y que en los últimos cuatro años de gobierno nacional fueron los principales perjudicados por las políticas oficiales y Concordia lo sufrió especialmente en la obra pública, en los despidos, el cierre de fuentes de trabajo, la pérdida salarial frente a la inflación, la precarización del trabajo, las condiciones de vida y el crecimiento inaceptable de la violencia de género.

Observamos que frente a la enorme crisis suscitada se produce una disputa política por quién debe pagarla. Valoramos positivamente el impuesto a las grandes riquezas que se comenzará a discutir en el Congreso Nacional para que sean quienes históricamente se beneficiaron con las políticas económicas los que esta vez también hagan un esfuerzo. Del mismo modo que nos parece un acierto no pagar y renegociar la enorme Deuda contraída por el gobierno de Mauricio Macri, consideramos necesario que se suspenda el pago definitivamente para su investigación. Hoy más que nunca la deuda es con el pueblo. Con los millones que viven bajo el índice de pobreza e indigencia, con los trabajadores, con las pymes de la ciudad y el campo, con los jóvenes cuyo futuro es cada vez más incierto, con las mujeres víctimas de violencia de género, en fin, con el pueblo en su conjunto.

Creemos que es momento de constituir un espacio institucional con el horizonte puesto en atender las necesidades de la mayoría articuladamente, y con la perspectiva política de que no sean las clases populares quienes paguen con su vida la crisis de la pandemia ni con el empeoramiento de sus condiciones de vida, agudizada por cuatro años de políticas neoliberales.

Problemáticas como la provisión de insumos básicos para el sistema público y sus trabajadores, el costo y acceso a los servicios informáticos y digitales, el acceso a la información, la provisión de alimentos y el control de precios, armonizando con los cuidados y protocolos que exige la pandemia necesitan de una respuesta contundente.

Las organizaciones sindicales y sociales que nos convocamos venimos actuando de distinto modo, mediante acciones directas sobre los problemas que aquejan al pueblo.

En virtud de esto, proponemos al Poder Ejecutivo Municipal la conformación de un Comité Local de Crisis, llamando a su integración al conjunto de las organizaciones sindicales y sociales cuya experiencia territorial, sindical y social, adquirida en largos años de militancia, nos permitirá contribuir en hacer más efectiva las políticas destinadas a paliar las tremendas consecuencias sociales y económicas que nos imponen las circunstancias actuales, desde una perspectiva de preservar derechos sociales y económicos. Esto en el camino de la construcción de una sociedad equitativa y solidaria, con activo rol del estado para garantizarlo.
Fuente: Prensa CTA Concordia

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