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Celia Vernaz / Foto El Entre Ríos
Celia Vernaz / Foto El Entre Ríos
Celia Vernaz / Foto El Entre Ríos
Por Andrea Cattani

Celia Ema Vernaz, nació en la Colonia San José y se crió en el campo. Fue a la escuela N° 5 de San José y estudió hasta 3° año en el Colegio de las Hermanas de la misma localidad; 4° y 5° año del Magisterio lo hizo en Concepción del Uruguay y en Paraná cursó el Profesorado de Historia. Una vez recibida dio clases en la Escuela Normal República Oriental del Uruguay, en otros establecimientos sanjosesinos y en el profesorado de Concepción del Uruguay. Fue docente durante 40 años. "Me sentí feliz dando clases", resalta.

Colaboró con muchas instituciones, especialmente con el museo local, ampliando el acervo histórico. Además, Celia es autora de varios libros.

A sus 87 años (amablemente nos autorizó a publicar su edad), la votación de la gente la eligió como Mujer Destacada del Departamento y el 15 de marzo será reconocida en la Cámara de Diputados de la Provincia.

En vísperas del Día Internacional de la Mujer recibió a diario El Entre Ríos en su casa. Hablamos de educación, del rol de hombres y mujeres en la sociedad actual, de los límites a los hijos, de política, de la vida?

-¿Cuántos libros escribió?

-Alrededor de 30. Empecé a escribir porque San José entró en la época del Centenario y se formó una comisión para buscar datos e ilustrar los actos, pero resulta que no había nada escrito. Solamente se encontró el resumen que hizo Claudio Premat de algunos de los inmigrantes; entonces surgió la necesidad de escribir lo que se sabía. Para encontrar datos tuve que recorrer mucho, no solo en la Colonia sino en otras ciudades, en los museos de Buenos Aires y de Europa, especialmente en los países que dieron inmigrantes como Francia, Suiza e Italia. Con todo ello empecé a escribir no solamente el desarrollo histórico de la situación política, económica y social, sino que tomaba un punto para desarrollar, por eso surgieron varios libros.

-Si tuviera que hacer un repaso de la historia de la región, ¿qué mujeres del departamento Colón destaca usted?

-Existieron mujeres notables. Yo di clases mucho tiempo en Colón, de allí recuerdo a las Srtas. Bourlot, maestras impagables y a la Srta. Castaldo, como rectora de la Escuela Normal. También otras señoras que formaron parte de la dirección de la escuela y lucharon por ella, además de otras mujeres que se destacaron en el desarrollo de la música y siempre las admiré.

-¿Por qué piensa que en esta oportunidad ha sido usted elegida como Mujer Destacada del Departamento?

-No tengo idea. Pienso que influyó la forma de elegir, porque se hizo por medio del voto, y en el voto la gente se anima más a expresarse que oralmente o en otras formas. Además el departamento Colón tiene muchísimas personas que fueron alumnos míos, entonces casi todos me conocen. Cuando yo me recibí no había profesores; acá en San José, ninguno, y en Colón muy pocos, entonces uno se hizo popular.

-¿Qué lectura hace de cómo ha ido evolucionando el rol de la mujer en la sociedad desde su primera juventud hasta ahora?

-La mujer en la sociedad ha evolucionado muchísimo en su accionar; no es más la mujer tímida que nosotros conocimos, por ejemplo, en nuestra infancia. Es distinta, más abierta, más buscadora, más luchadora. En este período de evolución, la mujer se inclinó a encontrar cosas, a buscar lo que quiere y se abocó a recorrer el intelecto para hacerse de más presencia cultural. De manera que veo que las mujeres, partiendo de las inmigrantes que también alcancé a conocer, han buscado una posición superior para poder desenvolverse en la vida. Buscó otros horizontes, no solo quedarse en la casa a criar hijos y cocinar, lo cual es muy loable, pero quería algo más; entonces se lanzaron a las universidades, aquellas que tenían capacidad intelectual y económica pudieron deslizarse en los distintos laberintos educacionales y hoy gozamos de la presencia de muchas que son un verdadero regalo para la sociedad, ya sea moral o culturalmente.

-¿Cómo quedó el rol del hombre en la sociedad, la familia, el ámbito laboral, con toda esta evolución femenina?

-Yo creo que el hombre entendió que la mujer es un ser humano igual que él y aceptó su labor. El hombre trabajó pero a la par trabajó la mujer, entonces comprendió lo que significa aunar los esfuerzos para una familia y caminar juntos por el mundo. Desgraciadamente hay casos hoy en día que no ocurre eso, pero el hombre siempre valoró y respetó a la mujer; lógicamente hay excepciones. Pero trabajar a la par, sentarse a la mesa juntos porque vienen de trabajar, a veces cocina el que primero llega y salen adelante, es muy importante. El hombre entendió que la mujer puede también.

-Más allá de esta evolución mi percepción es, dígame usted si coincide o no, que las mujeres seguimos estando en cierta desventaja. Tal vez el hecho de que se celebre un Día de la Mujer es una pequeña muestra de eso. Y la cantidad de casos de violencia de género que hay es terrible? No sé qué piensa de esto.

-El hombre acepta la evolución de la mujer con gusto. Ahora, con el hecho de la violencia de género pasa algo en la sociedad. Hay un punto que está fallando y es lamentable. El hombre siempre sintió sus fuerzas superiores y le cuesta equipararse a la mujer o concebir que esta pueda trabajar un poco más que él en ciertos casos. Así que es muy difícil consolidar la sociedad actual en una unidad positiva. Los casos de violencia de género se han multiplicado y agudizado; se lo toman como un derecho que perdieron hace tiempo y lo quieren rescatar: "Mando yo". Eso es duro de corregir; no cabe en nuestra sociedad esa percepción y sin embargo la vemos todos los días destrozando hogares e hijos; poniendo una piedra donde tendría que haber una flor.

-Se ve en hombres muy jóvenes este resabio de una sociedad machista ¿Qué se puede hacer contra eso?

-Creo que todo parte de la educación. A mi manera de ver, contraria a la metodología actual, al hijo hay que ponerle límites, educarlo, no largarlo a la calle y que se eduque como más le gusta. Yo soy de la idea de que hay que educarlo hasta avanzada edad, no darle rienda suelta para que haga su vida porque "ya es un hombre".

-Tal vez las madres de varones somos las primeras que no les enseñamos cómo comportarse y respetar a las mujeres.

-Efectivamente. Hay errores que tendrían que corregirse desde el nacimiento y no porque es el hijito que hay que darle libertad. Yo estoy con la libertad, pero limitada. La libertad sin límites pasa a libertinaje, y ese papel lo deben hacer los padres. Pero los padres, ¿están preparados para educar un hijo queriéndolos al máximo pero quitándoles poder cuando se adelantan al poder que quieren? Un niño pequeño no puede manejar las mismas herramientas que un hombre mayor. La libertad necesita límites; la gente cree que ser libres es hacer lo que uno quiere. Yo no tengo hijos, pero uno ve las cosas desde afuera y puede analizarlo más libremente desde afuera.

Por eso, el papel de la mujer en nuestra sociedad es muy importante. Pero ¿quién educa a esa mujer?, porque lamentablemente no toda persona está capacitada para ser madre, aunque lleve en el vientre a su hijo. Ser madre necesita una escuela que puede ser propia o dada por alguien que sabe. Yo esa evolución la vi en la escuela, no todas las maestras toman el papel de educadoras como madres, porque la maestra es una madre.

-¿Cómo ve la evolución de la educación, la escuela actual, los maestros??

-Veo que los maestros tratan de educarse, porque van a los cursos que se dictan. Da la sensación que el maestro quiere avanzar; ahora no sé si ese procedimiento es correcto, si lo hacen como deberían.

-Sabrá que en la actualidad los maestros llevan adelante una gran lucha por mejorar su salario ¿Cómo ve el tema de las huelgas docentes?

-Es lamentable que las maestras tengan que acudir a las huelgas para obtener lo que necesitan para trabajar ¿Cómo se arregla eso? Yo no soy economista, pero me parece que al empezar cada gobierno debe comenzar por los educadores. Muchos dicen "trabajan medio día y después tienen libre", pero no se sabe que en ese tiempo libre que tienen trabajan para toda la semana.

Ahora, la maestra tiene que tener el papel de maestra insertado en su corazón, como el de madre; tiene que querer a los alumnos. Tiene que dar su corazón al chico.

Yo daba clases en 1° grado de la Escuela Paso. El valor de la maestra de 1° grado es insuperable; merecen un monumento.

-Celia, le pregunto por el país en este año de recambio político ¿Cómo ve a la Argentina?

-Es muy interesante seguir la política argentina porque tiene de todo. Si se consiguiera que todos los políticos mantengan su partido, sí, porque tienen la libertad de hacerlo, pero a la vez se mantengan unidos para levantar al país, lo sacarían a flote enseguida, porque la Argentina tiene mucho para dar, pero no se pongan en contra de quien quiera ser el hacedor de un bien. Yo no estoy en contra de ninguno, porque cada uno tiene su por qué, que yo no lo tengo, solamente tengo la aspiración de que el argentino sea un ciudadano correcto, un hombre de bien y que no odie, por favor.

A un hombre que gobierna aun con sus enemigos pero no los odia porque sabe que son sus opositores y la democracia necesita opositores, hay que aceptarlo, aunque sea de otro partido. Si el principio que tiene es bueno, cómo no se lo va a incorporar. La Argentina puede llegar a grandes cosas. Hay hombres de mucha capacidad constructiva, pero hay otros que quieren el mal al que triunfa ¿Por qué esa maldad? Si no se gobierna solamente para un hombre sino para el país.

-¿Lo cree al Presidente Macri con capacidad constructiva?

-Bueno, recién empieza, y tiene muchos obstáculos porque la Argentina tiene muchos problemas. En unos meses más vamos a comprobar si puede o no hacer lo que dice. Pero los hombres son resentidos, entonces buscan donde le pueden hacer daño para bajarle el concepto. Es difícil doblegar la acción de un hombre a favor del enemigo, pero tuvimos casos: Urquiza y Mitre lo hicieron.

Yo creo que se puede hacer lo que se piensa. Es difícil la democracia, pero es necesaria.
Fuente: El Entre Ríos (edición impresa)

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