Cinco familias concordienses quedaron sin su fuente laboral, luego de que el propietario del local comercial de la cadena de carnicerías Friar, ubicado en la esquina de avenida Eva Perón y J.J. Solá, decidiera cerrar sus puertas.La triste novedad se conoció durante el martes. Según una fuente cercana, los propios trabajadores ayudaron a empapelar el negocio, destacando que su empleador “la peleó hasta lo último”, pero que no pudo con la poca demanda y los abultados costos fijos.
“Se fundió, trabajando”, destacaron los ex empleados. El caso se suma a tantos emprendimientos comerciales que vienen padeciendo en Concordia, el actual escenario de crisis y ajuste.