Sacado de quicio
De acuerdo a los datos recabados por el diario sanducero El Telégrafo, el 25 de febrero pasado Fernando Sorondo Dubois retornaba de la ciudad de Colón en su camioneta cuando fue advertido por funcionarios de Prefectura y Aduana que llevaba más mercadería de los cinco kilos permitidos, además de un bidón con combustible en la caja del rodado, que dijo llevaba por respaldo y había comprado en nuestro país.Tras ser avisado de la incautación, comenzó a filmar con su celular a la vez que expresaba su malestar por la medida en términos despectivos, video al que puede accederse en su perfil público de Facebook. “Acá estamos en la Aduana de Paysandú, Mercosur mediante. Acá hay una miliquita con aires de grandeza que me trata a prepo y me dice que no me tengo que poner nervioso. Me están sacando unos paquetes de galletitas que llevaba para los gurises, un litro de vinagre, un paquete de mayonesa y alguna otra porquería más. Si se creen que van a acomodar el país estos locos sacándome esas cosas, a un trabajador que lo único que hace es llevar cosas para abaratar el consumo del mes. Y sabemos muy bien que hay camionetas último modelo, que van con las cajas llenas, tapadas con una lona y ni las miran. Y ni hablemos de los aires acondicionados que se pasaban los argentinos para el otro lado... Eso se ve que no lo veían. Pero a mí me van a sacar una cajita de cinco kilos porque me excedí, en vez de una traje dos sí, pero quiero saber cuántos pasan cinco kilos justos… pero se la agarran con alguno siempre. Este es el Mercosur y la gente que está trabajando acá”, mientras mostraba a la funcionaria de Prefectura diciéndole irónicamente “la simpática”.
El hecho no quedó solo ahí, sino que una vez dentro de la oficina de Aduanas, donde debió esperar que le labraran el acta, siguió filmando. “Estoy grabando y el de afuera (por un marinero) me está mirando, porque tengo un custodio acá. Debo ser un delincuente grande porque el otro milico de Prefectura se fue y me dejaron a otro cuidándome acá por las dudas que me vaya. Me dijeron que no me desacatara, que bajara la voz, después de todo lo que me prepoteó la milica... perdón, la funcionaria de Prefectura. Se creen que uno no tiene sangre en las venas. Y bueno creo que va a haber que hacer algo acá para cambiar esto. Habría que hacer una gran limpieza por empezar, poner gente nueva y educada. Porque conozco militares con otra formación, no como estos que te echan la pesada y por una cajita que no llegaba ni a cinco kilos. No es que me excedí en 50 kilos”. (…) “Acá me vinieron a decir que sigo filmando porque éste que está acá (mientras muestra a un funcionario de Prefectura) le va a pasar el dato al otro que está allá”.
En tanto, el funcionario le dice nuevamente “no grabe caballero”. “Allá va a lambetearle al otro que sigo filmando”, comenta. “Están averiguando quién soy yo porque no saben si soy un delincuente o qué”, agregó. En un último video, Sorondo dice: “Son las 4.15 y sigo acá adentro demorado, han pasado ya unos 200 o 300 vehículos. Todavía no comí, se me va a hacer tarde para todos los trabajos que tenía pendientes para la tarde, todo por unos milicos cagones que están haciéndome la vida imposible”.
Escracho en redes
En tanto, las acusaciones vertidas en contra de los uniformados de Prefectura no fueron lo que llevaron a la imputación, sino un escrache que le hizo a un funcionario de Aduana cuando le labraba la correspondiente acta de decomiso. El edil suplente publicó en su cuenta de Facebook una fotografía del aduanero en que se lo ve sentado en un escritorio con la mercadería incautada, la que acompañó con otro posteo en que exhibe el acta y un texto en que lo trata de “imbécil e inservible”.Esta publicación --que actualmente no aparece visible en su cuenta-- fue la que dio origen a la denuncia por parte del aduanero, quien se presentó directo en Fiscalía. De lo obrado por parte del fiscal, se llegó a un acuerdo entre las partes en que se dispuso la retractación de Sorondo Dubois en su perfil de Facebook por el término de 30 días. Al no acatar la medida, días atrás el caso fue derivado a la órbita penal donde finalmente se dispuso la formalización de la investigación de Fernando Sorondo Dubois, quien resultó imputado por “un delito de difamación agravado”, imponiéndole la pena de 4 meses de prisión en la modalidad de libertad a prueba. Para ello, deberá cumplir con varias medidas, entre ellas, la prestación de servicio comunitario estipulándose dos horas por un día a la semana.
