En este marco, se han iniciado cruzadas solidarias para juntar donaciones para los inundados. Una de ellas es Todos por La Paz, que este jueves tomó contacto con Sandra Miño y su familia que desde hace días confecciona almohadones que serán llevados a los damnificados del norte de la provincia.
"Tenemos un miniemprendimiento familiar y surgió esto de colaborar y ayudar a los inundados", dijo Sandra y contó que "como creyentes y personas solidarias nació del corazón hacer algo por las personas que más lo necesitan. Gracias a mis hijas y mi marido, decidimos reciclar todas las costuras que tenemos y hacer almohadones para donarlos".
Al justificar su noble acción, Sandra fue categórica: "Uno tiene todo, estoy muy agradecida a Dios por todo lo que me da, hasta la salud y todo tiene una recompensa en la vida. Cuando algo se da de corazón, siempre se recibe con buen corazón. Lo poquito que uno pueda dar es muy importante, es una enseñanza que me dejó mi mamá y ahora se lo transmito a mis hijas; ellas fueron las que cocieron porque yo he perdido un poco la vista".
Contó que la idea de donar almohadas surgió a raíz de un chico que tocó la puerta de su casa vendiendo pan y en el diálogo que mantuvieron ella le comentó lo que hacía y él le contó sus necesidades y le dijo que "no tenía nada". De ahí surgieron las ganas de ayudar. "Muchas veces la necesidad está muy cerca de nuestras casas", dijo Sandra que no solo es solidaria con los damnificados por las inundaciones sino también con aquel chico que golpeó su puerta y otras personas del barrio que tienen carencias.