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El aumento progresivo en varios puntos del país, las nuevas cepas y la gran afluencia de turistas que se esperan con el inicio de temporada, hacen pensar en la inminente llegada de una tercera ola, luego de varios meses de una notoria disminución de casos covid.

En este contexto, entrevistamos a la Dra. Norma Hernández, directora del Hospital San Benjamín de Colón.

-¿Cuál es la situación epidemiológica actual del departamento Colón?

-Estamos en una situación estable pero que sabemos se puede desestabilizar en las próximas semanas.

En diciembre hemos realizado, entre consultorio y guardia, aproximadamente 95 test rápidos. Durante las primeras semanas prácticamente ninguno había sido positivo y a partir del 20 hemos registrado un aumento de la positividad en comparación con la totalidad de los test.

Cuando son positivos se realiza PCR y si tiene características de una viremia elevada se envía a Paraná, donde se hace una secuenciación de screening que no es definitiva. Después se manda al Instituto Malbrán para secuenciar cada una de las muestras.

Esto está dando la pauta de que en la provincia ha habido un aumento de la variante delta en todas las transmisiones de la mayoría de las ciudades principales, que se son las que tienen más casos (Paraná, Concordia, Gualeguaychú, Concepción del Uruguay), con lo cual sabemos que tiene mayor transmisibilidad y que la vacunación no genera protección en cuanto a la transmisión viral; sí en cuanto a enfermedad grave o requerimiento de internación.

Con la llegada de ómicron esto está en estudio, para ver cómo son los índices.

-¿Se detectaron casos de ómicron?

-En la provincia, hasta ahora, no hay secuenciación de ómicron. De todos modos, es una realidad que llegará debido a la difusión que ha comenzado a tener en otros puntos del país, como Córdoba y Buenos Aires.

-¿Qué se sabe hasta ahora sobre esta variante?

-Se sabe que es mucho más transmisible que delta y que no ha habido un aumento de casos graves, lo que puede estar con la vacunación.

Los últimos datos en Sudáfrica hablan de que se genera un pico elevado de casos, pero que este tiene una reducción en el tiempo de duración. O sea el aumento es exponencial, pero de corta duración.

-¿Los síntomas son los mismos?

-Sí, con una predominancia de síntomas de vías aéreas superiores, que sería una de las diferencias por las que se reduce la agresividad. Es más frecuente la rinitis o el dolor de garganta.

-¿Cuántos casos activos tenemos en este momento?

-Tenemos alrededor de cinco personas. Todos casos leves, están en su domicilio. Uno de ellos generó el contagio de un conviviente que estaba en aislamiento, y en principio de ellos no se habrían derivado más casos.

De todas formas, sabemos que por la época del año se producen reuniones. Además la mejoría de la situación epidemiológica ha llevado a relajar las medidas de cuidado. El hecho de que sea verano y estemos al aire libre genera sensación de que la protección es total y no es tan así, fundamentalmente en este tipo de variantes que parecen tener una transmisibilidad mayor.

-¿Están llevando algún tipo de estadística relacionando los casos positivos con el hecho de si esos pacientes estaban o no vacunados?

-Sí, y hasta ahora eran vacunados, en general con dos dosis; uno de ellos es personal de salud, no de trabajo diario con pacientes.

En la provincia se ve que la mayoría de los casos son en personas vacunadas. Por eso decimos que la vacunación no es un factor que reduzca la transmisibilidad. Inclusive se ve que son menos sintomáticas, quizá tienen una rinitis que se asocia con una alergia o antecedentes previos y no se le da importancia, por lo que no toman medidas como aislarse.

-¿Hay más positivos entre quienes se inmunizaron con determinada marca de vacuna?

-No. Se ha llevado estadística en la provincia, y con todas la incidencia de enfermedad ha sido más o menos igual.

-Actualmente, ¿cuáles son los criterios para hisopar?

-Toda persona que tenga clínica compatible (fiebre, dolor de garganta, síntomas respiratorios, diarrea, vómitos). Igual que antes.

Pueden concurrir al consultorio respiratorio que atiende diariamente a la hora 15 (excepto los domingos). También hay tests disponibles en guardia; por ejemplo el sábado hicimos cinco, de los cuales dos fueron positivos.

-Recuerdo que previo a iniciarse la vacunación en niños y adolescentes sin factores de riesgo, usted comentó en conferencia de prensa que había algunas dudas sobre la posibilidad de que la vacuna genere en los chicos una miocarditis ¿Registraron episodios?

-No, por lo menos no hubo reportes al respecto. La utilización de vacunas en distintos países, ha permitido revisar la evolución y qué es lo que uno puede esperar.

Hay que tener en cuenta que los procesos de producción de una vacuna nueva suelen llevar 10 años, por eso una situación hoy puede ser distinta el mes que viene. Nos vamos adaptando a lo que va apareciendo, cuando uno está acostumbrado a buscar evidencia científica y luego tomar decisiones.

-¿Hubo variación en el periodo interdosis?

-Se está acortando en el refuerzo. Por ejemplo, en mayores de 60 se pasó a cuatro. En menores de esa edad, se sigue manteniendo un mínimo de cinco meses.

En el caso de los mayores de 50 años vacunados con Sinopharm, se les dio una tercera dosis para mejorar su protección, ya que por su característica de ser una vacuna de virus muerto, se cree que el pico de anticuerpos dura menos. La tercera dosis es generalmente con AstraZeneca, Sputnik o Pfizer.

Con estudios que se fueron realizando, se vio que cuando se combinan dos tipos diferentes de vacunas, la capacidad de respuesta del organismo aumenta comparativamente a cuando se continuaba con vacunas del mismo tipo.

Entre la primera y segunda dosis se pasó a un periodo de 21 días, para tratar de que quien se decidió a vacunarse más tarde, pueda tener sus dos dosis en un periodo más corto de tiempo.

-¿Debería haber más restricciones en este momento en el departamento Colón?

-Hay que evaluar el contexto. Después de casi dos años de pandemia, la gente está muy cansada y sería imposible generar restricciones como al principio. La clave está en el cuidado personal; poner el foco en la presencia de síntomas respiratorios y si están, restringir el contacto con los demás y consultar para realizarse un hisopado.

También usar barbijo, mantener la distancia social y no compartir el mate, que es otra de las situaciones que vemos que se relajó, fundamentalmente en ambientes laborales.

Lo que sí creo que debería evaluarse como restricción, es la masividad de los encuentros.
Fuente: El Entre Ríos

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