La denuncia habla de que los afluentes que desembocan en el Arroyo Grande se encuentran con una gran mancha negra, que la atribuyen a la planta de asfaltado ubicada en las inmediaciones. Al parecer, la empresa encargada de la elaboración del derivador habría tomado la decisión de desecharlo.
En la redes
En Facebook, se pudo leer, "el único lugar donde puedo respirar aire puro, llevar las nenas a pescar, jugar con los niños, ya no es el mismo, está contaminado". Advirtiendo que "esto no es aceite, no es gasoil, es petróleo puro".
El texto incluso apela a la ironía, agradeciendo a la firma en cuestión "por contaminarnos".