A raíz de tareas investigativas llevadas a cabo por la Brigada de Prevención de Delitos Rurales Paraná, la Justicia aprobó que se ejecute un allanamiento en una finca en la zona suroeste de la ciudad en la que se percibían ruidos, cantos de aves y olor nauseabundo, por lo que se sospechaba que se podrían hallar especies en cautiverio.
En consecuencia, la Brigada de Abigeato Paraná procedió con la inspección minuciosa de la vivienda, en la que logró secuestrar dos jilgueros, seis reina mora, tres Juan chiviros, dos cardenales copete colorado y una corbatita. Además, localizaron 15 jaulas (grandes y chicas), un ejemplar joven de chancho jabalí y también se localizó, en poder del propietario de la finca, una escopeta calibre 16 de dos caños yuxtapuestos, sin marca ni numeración visible y 23 cartuchos calibre 16, armamento del que no pudo justificar su tenencia.
Las aves y el ejemplar jabalí, cuya tenencia en cautiverio se encuentra prohibida por la Ley Provincial de Caza N° 4.841, fueron secuestradas, puestas a resguardo y trasladadas fundación Tekove Mimba de Colón, para luego de evaluar la situación de cada ejemplar y liberarlas en un predio de más de 800 hectáreas.
El armas y la cartuchería, por su parte, fueron remitidas a Criminalística para su correcto peritaje, mientras que las jaulas fueron destruidas.
El titular del inmueble quedó supeditado a la causa judicial.
