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No sólo al olímpico Federico Bruno tiene Concordia como exponente en el atletismo internacional. Desde hace un tiempo, con notable proyección y podios en torneos sudamericanos juveniles, Dylan Van der Hock ha ido consolidando un estilo y en un futuro cercano emigrará hacia Estados Unidos para dar el salto, pensando en sus próximos desafíos, pero con el objetivo de apuntarles de lleno a los Juegos Olímpicos de París 2024.

Dylan fue uno de los cuatro entrerrianos que formaron parte de la Selección Nacional de Atletismo que compitió la semana pasada en el 52° Campeonato Sudamericano de Guayaquil. Si bien estuvo lejos del podio (finalizó 8° en los 1500 metros), dio ventaja de edad y de experiencia frente a los mejores –muchos de ellos olímpicos- de esta parte del continente.

“El balance es positivo. Fui a buscar roce internacional, este año hay muchas competencias y quiero aprovecharlas. En este caso era el más chico del equipo y siendo U20 es difícil competir con los grandes. De todos modos quería plantarme frente a los atletas olímpicos y correr fuerte, sin obligaciones”, destacó en diálogo con “El Entre Ríos”, y reconoció: “No fue una buena marca, pero el roce me sirvió”.

Entre la variada oferta de competiciones que aparecen en el espectro del atleta de 19 años se destacan el Sudamericano y el Mundial de las categorías U20 y U23. Paralelamente está terminando los trámites para viajar y radicarse en Estados Unidos, con beca completa en universidad, la que consiguió a través de sus magníficos resultados en el Sudamericano U19 de Chile: oro en 3000 y bronce en 1500. “Firmé contrato y tengo todo listo para irme en septiembre. Es una puerta para pensar en los JJOO de París 2024. Este ciclo olímpico aprovecharlo allá, rozándome en el más alto nivel y llegar bien parado al Panamericano 2023, que es una antesala de de París. Hoy creo que es posible, sino pensar en llegar al de 2028”, explicó Dylan, que terminó la secundaria en 2019 y una vez que se radique en Estados Unidos comenzará la Universidad.

Van der Hock fue uno de los atletas que recién pudo aprontar el bolso para viajar a Guayaquil un puñado de días antes del Sudamericano, ya que no figuraba en la lista seleccionada por el Enard. Y fue gracias al aporte económico que gestionó el influencer Santiago Maratea a través de sus redes sociales. “Está de más decir que es una gran persona y muy humilde. No se da cuenta de todo lo que genera. Su ayuda nos abre las puertas para conseguir sponsors. Cada vez dependemos más de las redes, más allá de las marcas que logremos en las competencias, el sponsoreo va mucho en la cantidad de seguidores”.
Fuente: El Entre Ríos

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