Se trata de un emprendimiento dedicado a la elaboración artesanal de mermeladas, productos en almíbar y panificados, que funciona en la localidad de La Criolla (Departamento Concordia).
La propietaria le había enviado un mensaje por Facebook al jefe del Estado, invitándolo a visitarla en su casa, donde, entre otras cosas, produce 130 frascos por día de mermelada.
La visita también fue propicia para que el presidente conociera al padre de la emprendedora: Carlos, un inmigrante alemán de 97 años.