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Transcurrió, este martes, la cuarta audiencia del juicio oral y público por el crimen de Susana Villarruel y cuyo marido, Ramón de la Cruz Ortiz, es el único imputado bajo la figura de homicidio triplemente calificado por el vínculo, la alevosía y el femicidio.

El Tribunal de Juicios y Apelaciones de Gualeguaychú e Islas del Ibicuy está integrado por los doctores Mauricio Derudi (quien dirige el debate), Arturo Exequiel Dumón y el juez de Garantías y Transición N° 2, Guillermo Biré, que reemplaza a la doctora Alicia Vivian quien se encuentra con licencia.

El doctor Martín Clapier ejerce el rol de defensor oficial y en representación del Ministerio Público Fiscal intervienen Martín Gil (quien llevó adelante la Investigación Penal Preparatoria) y Lisandro Béhéran (fiscal coordinador general).

Testimonios de vecinos y de un bancario

La de este martes fue la cuarta audiencia y comparecieron como testigos quienes están vinculados al barrio Toto Irigoyen, donde vivía la víctima. La describieron como una persona trabajadora, "buena madre" y "buena vecina", entre otros elogios que incluyeron a su familia.

Además, mostraron cómo Villarruel quería iniciar los trámites para asegurarse (luego de la separación de su esposo) que la casa quedara para sus hijos: tres del primer matrimonio, dos de Ortiz y una sexta que tuvieron en común.

También declaró un empleado del Banco Nación, quien confirmó que el lunes 10 a las 9:27 se utilizó en un cajero automático la tarjeta de Villarruel vinculada al cobro de la Asignación Universal por Hijos y retiraron 900 pesos de esa cuenta. El dato es más que significativo porque aproximadamente dos horas antes, la víctima ya estaba sin vida, según estimaron los médicos forenses.

Ortíz golpeó violentamente a su mamá

Pero el testimonio más sensible que se escuchó fue el de Beatriz Noemí Espíndola, madre de Ortiz, quien testificó por decisión propia dado que está comprendida en las generales de la ley.

La madre de Ortiz confirmó que el 18 de enero recibió a su hijo en la vivienda que tenía en Avenida del Valle; y que su propio hijo le propinó un golpe con un elemento contundente que le provocó una grave lesión en el cráneo, por la cual tuvo que estar internada diez días y aún padece secuelas motrices y en el habla.

Consignó que esa agresión fue con el objetivo de apoderarse de electrodomésticos y otros bienes, y cuya investigación por separado la lleva adelante la Fiscalía. La percepción fue clara: la violencia y agresividad de Ortiz quedó evidenciada ante el ataque inusitado a dos mujeres por demás significativas en la vida de todo hombre: su madre, que salvó su vida por milagro; y su esposa y madre de su hija, quien no tuvo chance alguna. Y todo eso en menos de seis meses.

La jornada finalizó con la incorporación de los videos de seguridad del Banco Galicia, donde se identifica a Ortiz a las 9:27 del 10 de julio realizando una extracción de un cajero automático y que ahora se sabe por informes bancarios que para ello utilizó la tarjeta de Susana Villarruel y extrajo 900 pesos. Dos horas antes, la mujer perdió la vida, como consecuencia de sufrir un ataque tan cruel como feroz, tan desalmado como agresivo.

El juicio se reanudará este miércoles y se estima que este jueves se realizarán los alegatos de clausura de las partes, momento en que el Tribunal pasará a deliberar para realizar a la semana siguiente el adelanto del veredicto y confirmar la fecha de la lectura de la sentencia.

Femicidio en Entre Ríos

Susana Villarruel perdió la vida de manera violenta en la mañana del 10 de julio pasado, en inmediaciones de calle Irazusta al Sur y el puente sobre el Arroyo El Cura. Su cuerpo apareció 48 horas después, escondido entre las malezas del lugar.

La autopsia, luego, confirmó que había recibido varias puñaladas con un elemento punzo cortante y las heridas fueron compatibles o provocadas por una persona zurda, característica que es coincidente con Ortiz. Se trató del primer femicidio registrado este año en Gualeguaychú.
Fuente: Diario El Argentino de Gualeguaychú

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