En una jornada de intercambio, debate y reflexión en torno al cuidado de la Casa Común, organizada por la Red de Universidades para el Cuidado de la Casa Común (RUC) y la Pontificia Comisión para América Latina (PCAL), más de 200 rectoras y rectores de universidades de Latinoamérica y el Caribe viajaron al Vaticano. Dentro de esta comisión estuvo presente el rector de la UNER, Andrés Sabella.
Según informaron, el objetivo fue elaborar propuestas y acuerdos académicos para comenzar a organizar la esperanza y reconocer a la Universidad como un actor ineludible de nuevos procesos regionales. Asimismo, consensuar posibles acuerdos fraternales para caminar en conjunto hacia una conversión ecológica.
Durante el encuentro se trabajó en grupos temáticos, de acuerdo a la especificidad de cada casa de estudio y con las necesidades urgentes de los territorios. Por su parte, Sabella integró el espacio referido a la crisis social: degradación social, inequidad y debilidad de la reacción. También se discutió sobre crisis ambiental, económica y cultural.
El jueves el encuentro comenzó con la entrega de un manifiesto firmado por las rectoras y los rectores, en el que se expresa el firme compromiso por promover un uso responsable y ético de la inteligencia artificial. Continuó con la exposición sintética de las conclusiones arribadas por las cuatro comisiones de trabajo del día anterior.
Ese día, Sabella le obsequió al Papa un libro de la EDUNER, El arte de cebar y El lenguaje del mate, de Amaro Villanueva. Se trata de dos obras centrales de uno de los autores más importantes de la Editorial de la Universidad.
Por otra parte, el Grupo Técnico, conformado por Sabella, compartió un escrito basado en varios puntos. En ellos se destaca que “el trabajo ha perdido lugar como centro de la organización social afectando a las juventudes” y “la inequidad en el acceso a los bienes básicos se hace evidente, lo cual genera una injusta distribución internacional de la riqueza”. Además, el grupo se interroga sobre la posibilidad de “creación de una red de juventudes latinoamericanas que puedan proponer soluciones”.
Los puntos arribados fueron compartidos con el Papa Francisco en un extenso diálogo posterior que mantuvo con los asistentes. Allí el pontífice aportó sus miradas, opiniones y reflexiones. También desafió a los representantes de universidades a asumir el compromiso de instar a las juventudes a participar políticamente para generar las instancias democráticas para los cambios que necesita nuestra sociedad.
Por otro lado, a lo largo de la semana el rector visitó la Universidad de Bologna, la más antigua de Europa y la Universidad Per Stranieri Di Peruggi, una casa de estudios ubicada en la ciudad de Perugia. A su vez, participó de la presentación que realizó el CIN ante la Conferencia de Rectores de Universidades Italianas sobre la estructura y el funcionamiento del sistema universitario argentino.
