Pero la situación que se vive en Alcaraz es dramática desde que una feroz granizada, el 18 de noviembre, destruyó casi por completo el techo de la escuela, y daño severamente a otras 60 viviendas de este pueblo ubicado a poco más de 100 kilómetros de Paraná.
Desde entonces, toda vez que llueve la escuela queda peor: no saben dónde guarecer los pocos muebles y equipos que se mantienen en pie y a salvo del agua. "Es desesperante tener que armar y desarmar la escuela cada vez que llueve para salvar lo poco que tenemos", dice.
El jueves 4, el por entonces electo gobernador Gustavo Bordet mantuvo un encuentro con todos los intendentes electos por Cambiemos, cónclave del que participó también su futuro gabinete. Entre ellos, el actual titular Ministerio de Gobierno, Mauro Urribarri.
Cada intendente planteó sus demandas, las más urgentes, relacionadas al retraso en los giros de coparticipación; otros jefes comunales, como el caso del intendente de Alcaraz, Darío José Pfening, habló de la situación desesperante de la escuela sin techos y de las familias cuyas viviendas quedaron destruidas por el temporal del 18 de noviembre.
Urribarri tomó la palabra y prometió ocuparse del asunto. Antes, también había prometido lo mismo el senador departamental oficialista Aldo Ballestena.
Pero en Alcaraz ya soportaron dos nuevos aguaceros, y la solución todavía no llega.
Esta mañana de jueves, el aguacero fue importante: 70 milímetros en nada más que 30 minutos, lo que derivó en que se inundara hasta el edificio municipal, situación que obligó al intendente Pfening a suspender su asistencia al encuentro con el Gobernador, al que estaba citado junto a todos los jefes comunales de Cambiemos.
Las autoridades provinciales habían prometido arreglar los techos en el corto plazo, pero nada ocurrió, y si todo sigue así la rectora dice que será difícil poder arrancar el ciclo lectivo 2016.
En estos días, tiempos de exámenes, los docentes se han parado en el vano de la puerta a examinar a los alumnos por la falta de espacio sin inundar
La rectora dice que ha escuchado varias veces promesas oficiales de solución, pero de momento ninguna concreción. "D Arquitectura vinieron el lunes 20 de nov. Evaluaron el estado de la escuela. Nosotros hicimos una nota con fotos. Se llevaron todo eso. Nos expresaron que no da para más, que había que cambiar todo el techo, y se comprometieron con la provincia para cambiar las chapas. Pero hasta ahora no han hecho nada. Si no nos resuelven la situación de los techos en el receso, no podemos empezar las clases. En estas condiciones, no podemos", asegura.
