"Quizás no fue una notoriedad… Tal vez no brilló, no fulguró. Más bien privilegió el bajo perfil; bajísimo. Priorizó la simpleza. Hizo de su profesión un culto de la sencillez". Así lo describió Calderón, en un texto publicado por el sitio Cuestión Entrerriana:
"Carlos Bolzán prestigió las páginas de El Diario y no solo formó parte de equipos de Redacción en áreas de Comunicación de la Municipalidad de Paraná, sino que también su óptica periodística la enriqueció manejando de modo creativo cámaras fotográficas, captando precisamente los registros más naturales, absorbiendo la esencia de innumerables retratos.
Tuve el honor de trabajar con él. Su desempeño en El Diario de Paraná se caracterizó por la modestia y por algo en que solemos fallar a menudo los comunicadores: era extremadamente afecto a la objetividad; rigurosísimo. Su estricto estilo tenía estrecho vínculo con sus predecesores o superiores, dentro de una línea Editorial casi inflexible para ciertas Secciones.
Esa condición la irradió en todos los géneros de la Prensa y paradójicamente ese fue el sello que lo distinguió del resto.
Su capacidad irrefutable redundó en la producción de información equitativa y justa, como de suma calidad y compromiso ético. Lo cual implica excelencia y veracidad a partir de un enfoque fiel.
Con esa misma simplicidad se manejó en la vida, en cuanto a relaciones con sus colegas que hoy le tributamos esta escueta pero significativa columna para rememorar su condición, su cualidad, su sello perenne.
Te fuiste sin contarnos qué te pasaba en lo más íntimo de tu ser. Rubricaste tu conducta conservadora, moderada, mesurada.
Para quienes te conocíamos será una ausencia que se sentirá en distintos ámbitos. Para el resto tal vez pase desapercibida. Lo cierto es que no faltarán miradas a ese cielo con el color de tus ojos, orando por el descanso en paz de tu alma.
Hasta siempre Carlitos… Nos unimos al profundo dolor de tu Familia. Que Dios te acoja en su Gloria y a su diestra".
