En el estado de Mato Grosso del Sur, los investigadores identifican la deforestación en el Amazonas como uno de los principales factores en los incendios del Parque El Pantanal, reveló el sitio Globo.com.
El helicóptero de la Marina ha arrojado más agua sobre las llamas, pero el fuego está lejos de terminar. En el terreno, los equipos buscaron evitar el brote. El horizonte humeante y el río Paraguay con el nivel del agua muy por debajo de lo normal para ese momento son motivo de gran preocupación para los investigadores.
“Esta baja cantidad de lluvia significó que este año tuvimos la inundación más baja en los últimos 47 años. Y, según nuestras estimaciones, es muy probable que también tengamos la mayor sequía en el mismo período”, evalúa Carlos Padovani, de Embrapa.
Ahí radica el problema: con mucho fuego, mucho humo y mucho calor, no hay evaporación y no queda humedad en el aire para formar nubes de lluvia. Es por eso que la sequía extrema continúa empeorando.
La explicación de los investigadores también se puede encontrar en la devastación de la selva amazónica, porque de ahí proviene la mayor parte de la humedad que alimenta al Pantanal. El bosque arroja al aire la humedad que llevan las corrientes hasta llegar a los Andes. Luego regresa, distribuyendo lluvia a toda una región que va al sur de Brasil. Cuando este macizo verde comienza a fragmentarse, no libera tanta humedad y no hay lluvia en el Medio Oeste.
