Acompañamiento
Las expectativas en Cambiemos son enormes, por lo menos así lo dicen los jefes de campaña. ¿Cómo lo ve usted?
"Uno advierte un clima interesante en las recorridas. Hay muchos independientes adhiriendo a la propuesta y ese es un dato interesante".
¿A qué lo atribuye a eso: al cansancio de un proceso político que llevó 12 años a una propuesta nueva?
"En Entre Ríos, desde 2003 hasta 2015, aunque en diferentes variantes, las propuestas políticas que manejaron el Estado han sido siempre peronistas y sin dudas hay un proceso que se ha acabado. Por otro lado, nosotros pudimos aparecer como una opción para la gente y que lo ve como una esperanza hacia el futuro. En 2009 tuvimos un triunfo electoral, pero que no sólo no se consolidó, sino que n siquiera se mantuvo. Yo creo que la sociedad, luego de un tiempo prolongado, necesita una alternativa y nosotros pudimos construirla. Cambiemos nació como una herramienta electoral, pero sin dudas le fuimos dando forma política al proyecto que está teniendo inserción en lugares que nos era ajeno, por ejemplo el deporte. Yo estoy viendo acompañamiento en ámbitos que se identificaban generalmente con el peronismo. Sinceramente nos acompaña gente común que se identificaba con el peronismo".
Interrogado por las elecciones de 2019
Cambiemos tiene en Entre Ríos 29 municipios, en la que una clara mayoría son radicales. De imponerse el 22 lo harían con una lista encabezada por un radical. ¿Tendría que tomar nota el PRO de esto para la candidatura a gobernador en 2019?
"Primero falta mucho. Segundo creo que hay que tener objetivos a mediano y largo plazo. Pero también es cierto que la política las vamos haciendo día a día y la construcción de un candidato a gobernador requiere de un tiempo. La territorialidad del radicalismo es fuerte en Entre Ríos, pero el PRO tiene una presencia indiscutida como la de (Rogelio) Frigerio. Pero esto se discutirá y el candidato surgirá de una construcción colectiva no sólo con los partidos políticos del frente, sino también que tiene que ser fruto de la incorporación de organizaciones y gremios, por ejemplo, para ver qué hacemos con el sistema previsional. Decir no a la transferencia de la Caja es decir algo obvio, ahora tenemos que sentar a todos los sectores y discutir qué hacemos para llevarlo como propuesta electoral para el 2019. Bueno, esto también es parte de la construcción política".
¿Qué cuestiones, entre ellas políticas, no le gustan del PRO?
"Mirá, lo que no nos guste lo tendremos que ir manifestando en el frente, tampoco vamos a hacer banderas de nuestras diferencias. Sí hay cuestiones que creemos y estamos de acuerdo y que está por sobre otras, como es la idea del Estado al servicio de la gente".
¿Qué puede aportar el radicalismo a "Cambiemos" aparte de la territorialidad?
"Bueno, que la territorialidad del radicalismo estaba intacta es relativo. Después del 2001 nos habíamos quedado sin nada. Esto lo empezamos a reconstruir y lo seguimos haciendo. En el 2015 sin dudas hubo un salto importante en el que sumamos concejales y senadores que ahora tenemos el deber de defender las banderas del radicalismo en un proyecto colectivo".
¿Dónde puede llegar a estar Galimberti en el 2019?
"Acá no va haber una aspiración personal porque sí, será el resultado de negociaciones que se darán en el ámbito de "Cambiemos". Vamos a estar donde nos toque".
