El hecho ocurrió en la mañana de este martes cuando un grupo de funcionarios del cuerpo de inspectores se disponían a clausurar el local comercial por encontrar la cadena de frío cortada, alimentos en mal estado y la habilitación comercial caduca, cuando cerraron las puertas del local y se retuvo dentro a los inspectores contra su voluntad.
Ocurrió en el supermercado Luna ubicado en Don Bosco y Vázquez de la capital provincial.Según los funcionarios el local estaba transferido y había sido dado de baja pero continuaba trabajando sin la correspondiente habilitación comercial.
Los agentes de Habilitaciones debieron llamar a la Policía para que los liberaran, según relató Fabián Rueda, titular del área.
Luego del episodio se radicó una denuncia en la comisaría decimocuarta de Paraná.