El caso de la joven de 13 años presuntamente abusada que fue sometida a un aborto no punible de 20 semanas de gestación repercutió en toda la provincia, poniendo de relieve los criterios que rigen en la aplicación del Protocolo de aborto no punible en Entre Ríos. A raíz de este hecho, varios médicos solicitaron ser objetores de conciencia para casos de aborto no punible.
Uno de los ejes del Protocolo de aborto no punible refiere de las personas con derecho a realizarse la intervención, tal es el caso de los que sufren un abuso sexual. Para estas situaciones, el Protocolo no estipula que se realice una efectiva investigación de las circunstancias que rodean al supuesto abuso. En este sentido, el Director del Hospital Masvernat, el Doctor Miguel Ragone, había indicado a ElEntreRíos que "se tendría que modificar el protocolo de aborto y que incluya la denuncia correspondiente, para superar la contradicción con el nuevo protocolo de abuso infantil”.
Otra mirada respecto a este tema la dio uno de los médicos testigos de lo ocurrido en Concordia: consideró que pueden haber escenarios en los que se esconde el abuso a un menor en el espacio intrafamiliar pidiendo la implementación del aborto no punible sin denuncia previa, soslayando el debido proceso de investigación de los hechos.