"Tenemos más gente necesitando atención que capacidad instalada. Los médicos eligen a quién atender por la gravedad", dijo el director del Departamento de Regulación Médica de Rio Grande do Sul, Eduardo Elsade, al canal local RBS TV.
En ese contexto, el gobernador del Estado sureño, prolongó también para la semana en curso las rígidas medidas de restricción, que en Brasil identifican bajo la expresión “bandera negra”. Caxias do Sul es una de las ciudades más grandes ubicadas dentro del mencionado Estado, con una población superior al medio millón de habitantes.
Solo en la calle
“A mí me encontrás yendo al estadio, caminando, por supuesto que soy el único que va caminando en la ciudad y eso que es muy grande. Es lo que nos toca vivir y saber que hay que cuidarse, no queda otra”, dijo en diálogo con El Entre Ríos. El juninense contó que “acá la situación desmejoró con respecto al tema del COVID-19. En lugar donde me toca vivir a mí, que es Caxias do Sul, en el estado de Río Grande do Sul, el gobernador ha decretado el cierre de todas las actividades, excepto lo esencial (farmacias, supermercados y demás)”, repasó.
“Lo hizo por una semana y ahora lo extendió”, confirmó el coach y dijo que la situación le recordó “un poco lo que nos pasó a nosotros al principio cuando dada 15 días iban modificando la situación”.
Destacó que, mientras tanto, se está avanzando en la campaña de vacunación, de un modo similar a cómo se realiza en Argentina.
El cambio de reglas, por el avance de los casos y la detección de nuevas cepas, afectó a todos. Así lo explicó el profesor de Educación Física: “La situación es un poco difícil porque acá estaba todo liberado y, de buenas a primera, te encontrás con otra realidad que, en una de esas, también vivimos nosotros. Hay que cuidarse”, reflexionó.
