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Las palabras corresponden a Carlos Bantar, director del nosocomio San Martín, de Paraná, quien afirmó que los datos arrojan que la situación de transmisión del Covid se agravará. En diálogo con Cuestión de Fondo, el médico aseguró que estamos en uno de los países más exitosos de vacunación e insistió en que la vacuna “es una gran protección a la forma letal”.

-¿Cómo observa este nuevo momento de la pandemia?

Esta pandemia nos presenta siempre un nuevo escenario, y este es un nuevo escenario, porque estamos frente a una situación inédita donde vemos un gran aumento de casos, que probablemente supere los niveles históricos de las olas anteriores, pero no acompañado por un nivel de afectación en pacientes que deben internarse en Sala General o en Terapia Intensiva. Hay una curva recta hacia arriba que no es acompañada por internaciones. Entonces nos toca mirar otros parámetros, más allá de los contagios. Y esto es importante porque lleva a un rediseño de la prestación sanitaria, es decir hoy el estrés lo vamos a tener en los lugares de hisopados, donde la gente quiere saber si se contagió, que va con síntomas leves, porque tenemos una variante en puerta, que es la Ómicron, que es dos a tres veces más transmisible que la Delta. Además, Argentina tiene una situación particular porque no ha tenido tercera ola, como tuvo el resto del mundo.

-¿Usted ha notado que ese contagio va avanzando, más allá de que todavía no hay un caso concreto como ha sucedido en Santa Fe, Rosario o Córdoba?

-Sí, lo que pasa es que al no haber tenido la ola de la variante Delta, no la podemos comparar, como compararon otros países, entonces es seguro que Ómicron se está montando sobre la Delta, pero todavía no sabemos si es preponderante. Pero sin dudas lo va a ser, porque en la competencia eso sí se sabe, es dos a tres veces más transmisible que la variante Delta, que a su vez era más transmisible que las variantes anteriores.

-¿Cuál es la realidad de Terapia Intensiva?

-Hemos tenido el fin de semana en la provincia ingreso de seis o siete pacientes a Terapia, en el hospital San Martín no tenemos ninguno.

-¿Y esos pacientes son en su mayoría no vacunados?

-En su mayoría son no vacunados, claramente hay una diferencia acá y en todo el mundo en la afectación de pacientes no vacunados. Dinamarca publicó a mediados de diciembre un estudio de la variante Ómicron, con sus primeros 700 pacientes, donde tenía un 90% de pacientes vacunados la mortalidad fue cero, y el ingreso a Terapia fue de 1,2%. Es decir, tuvo nueve pacientes solamente ingresados al hospital. Vale decir que es de esperar que la vacuna proteja contra eso. Un dato importante, también en una publicación reciente en Estados Unidas muestra, que si bien en un número acotado de nos 500 pacientes, la vacuna puede proteger la enfermedad grave con la variante Ómicron en un 70%, o en un 30% a ser la enfermedad sintomática solamente, por eso nos infectamos aún estando vacunados, pero si recibimos el refuerzo, esa protección puede aumentar al 70 o 78% para ser la enfermedad sintomática, aún de síntomas leves. Es una gran protección a la forma letal, de manera que la respuesta sigue siendo la misma: la vacuna.

-¿Ustedes cuándo entienden que Ómicron puede arrancar acá? Porque estamos hablando de realidades muy cercanas, como la provincia de Santa Fe y Córdoba.

-No sabemos, yo creo que debe haber arrancado, tenemos cepas en estudios ya, para ver si son Ómicron, con muchas probabilidades de ser Ómicron, y hemos tenido visitantes de Córdoba positivos, por ejemplo, el fin de semana anterior en la posta del hospital San Martín, así que es muy probable que Ómicron esté acá. Y estamos muy cerca de documentar la transmisión comunitaria.

-Hay que ver cuáles son los coletazos de las fiestas navideña en principio, y la de fin de año que siempre es superior.

-Y a ese coletazo le viene el retorno de quienes se fueron de vacaciones a lugares masivos y lugares cerrados, que es lo que más tememos nosotros.

-Siempre tomo de ejemplo su frase en un reportaje reciente que le hiciéramos: “el que se distrae en esto, pierde”. El tema es que la distracción pasó a ser moneda corriente. Hoy por hoy creo que la gente toma esta cuestión de que si entra a un local cerrado entra con el barbijo, o si no le advierten, pero hay una conducta de dejadez, que ya pasó, tenemos la vacuna.

-En la salud pasa eso, al enfermo o al que tiene la amenaza de la enfermedad, el susto se le pasa rápido, pasa con la diabetes, con las enfermedades cardiovasculares, con los pacientes hipertensos. El susto se pasa rápido y haciendo alusión a uno de tus programas, la memoria es frágil y se pierde rápidamente. Y acá pasa lo mismo. Y es cierto que venimos de un hastío y que cuando uno se saca el barbijo le cuesta volver a ponérselo. En el hospital hoy justamente he dado la instrucción de poner carteles de uso de barbijo obligatorio, en los familiares y demás. Siempre lo hicimos, pero existen esos mecanismos de autojustificación, por ejemplo, dicen “me lo saqué para tomar mate”, como si el virus nos diera una tregua para comer una medialuna o para tomar mate, cuando nos sacamos el barbijo, entonces esas costumbres son cuando se han retomado que por otra parte son saludables, muestra de amistad, de confraternidad, pero son difíciles de volver a instaurar.

-A la gente se le viene insistiendo no compartir el mate, modalidad uno, que no se negocia, y la gente ya comparte el mate.

-Sí, se ha olvidado y bueno, ahora el desafío por delante que tenemos es que aunque estamos viendo casos leves, lo primero que uno debe aclarar es que esto está todavía por verse, porque la mayoría de los casos, por ejemplo en el país donde eclosionó esta variante, es en pacientes jóvenes que podrían haber transitado esta enfermedad leve con cualquiera de las variantes, entonces todavía no sabemos bien si esta variante es o no más letal que la otra, o realmente con los vacunados, esta y cualquier otra variante que la precedieron en realidad son menos agresivas porque nos defiende la vacuna. Y tenemos pese a todos los augurios, pese a toda la politización del plan rector de vacunación, estamos en uno de los países más exitosos de vacunación.

-Repáseme cuánto se vio afectado en este año la estructura del hospital San Martín por todo esto ¿Cuántos enfermeros o personal se vieron afectados? ¿cuántos fallecidos padecieron por esta situación?

-Personal afectado, muchísimo. Personal fallecido hemos tenido varias bajas en la provincia, personas incluso jóvenes, de 50 años, enfermeros, tuvimos médicos afectados muy seriamente, y médicos que tienen lo que se llama Long Covid, que a año después siguen teniendo síntomas de agitación, de debilidad, es decir, hemos tenido una afectación de la enfermedad, pero sobre todo como institución en el relegamiento de otras patologías. Hoy estamos prácticamente utilizando los quirófanos para operar enfermedades malignas que han sido relegadas. Estados Unidos tuvo una mortalidad adicional del 20% en 2020.
Fuente: Canal 9 - Análisis Digital.

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