La directora del establecimiento, Hilda Leguizamón, indicó que “el sábado a las 12 de la noche me sonó el celular, por un nuevo hecho de robo en la escuela”. Y precisó: “A las puertas directamente las arrancaron”.
“El oficial que me esperó a las 8 de la mañana, estaba pálido. No sabía como contenerme, no quería que yo llegara sola a pararme para ver los destrozos” dijo la docente. “Cuento esto para que se tome idea de la magnitud de los destrozos, más allá de lo que se robaron", explicó.
“A esto no hay quien lo pare”
La directora de la institución manifestó que “llegó el momento que alguien tome la posta y organice un foro, comisión, algo totalmente apartidario, porque todos están enloquecidos con las candidaturas, con las campañas, sin distinción de colores políticos… Pero no he escuchado a nadie ocuparse del tema drogas y lo que conlleva: inseguridad, violaciones, todo”.“Acá hay que diseñar un plan de acción inmediato. Pero a nadie le importa nada, más que el lugar que pueda ocupar en la lista”, sentenció. Y agregó: “Esa clase alta que nos mira por encima del hombro, también va a sufrir lo que estamos sufriendo nosotros. Porque a esto no hay quien lo pare”.
