El concejal radical Pablo Hernández está privado de su libertad hace más de un año, en el marco de la causa Narcomunicipio, acusado de efectuar el vínculo político con Daniel “Tavi” Celis, uno de los principales jefes del narcotráfico en Entre Ríos, con varias causas sobre sus espaldas. A pesar de ello, el concejal jamás dejó de cobrar su sueldo, al igual que su empleado auxiliar, que no cumple ninguna función desde entonces.
Pablo Hernández está detenido y no realiza ninguna tarea en el Concejo Deliberante de Paraná, pero aun así, sigue cobrando el sueldo: 74.300 pesos, pero al municipio le sale 122.300 pesos, teniendo en cuenta los aportes patronales y la ART. Es decir que Hernández, en un año, percibió de la Municipalidad de Paraná un total de 1.590.000 pesos y nadie se inmutó por tal situación.
Asimismo, la asistente auxiliar de Hernández, que sería su actual esposa, percibe también un salario mensual, de 41.100 pesos, que pasa a 60.500 pesos con aportes. En este sentido, en un año, cobró 786.000 pesos del Estado municipal. Cabe destacar que esta persona no cumple ninguna función desde que el concejal está preso.
Durante el año transcurrido desde su detención, el bloque oficialista de Paraná no realizó ningún planteo en torno a la circunstancia de Hernández, ni para pedir la remoción ni para concretar un descuento del sueldo, como gesto institucional y moral.
