De acuerdo al registro de la Cooperativa de Transporte de Paysandú, considerando la semana entre los días 5 y 11, se vendieron 12.300 boletos, pero entre el 12 y el 18 la venta cayó a 2.300 boletos. “La caída no solo es muy brusca sino muy abrupta. Si no tomamos medidas que puedan darle oxígeno a la empresa, las consecuencias serían muy serias”, advirtió Tagliani.
Por esa razón, “el servicio urbano empieza a trabajar como domingo, con frecuencias cada hora, lo que significa destinar una sola unidad por línea. Esto es, reduciremos en un 50% la cantidad de ómnibus en uso”, detalló y agregó que “hay servicios que los vamos a mantener, como los más tempraneros, porque sabemos que viaja gente al trabajo, como el caso de los trabajadores de la salud. Lo mismo pasará con el turno de las 22 desde Nuevo Paysandú, porque trasladamos a quienes cumplen funciones en Ancap”.
“Por lo demás, los turnos se reducirán a uno cada hora, culminando los primeros a las 20.30 y el último será el de Nuevo Paysandú, a las 22”, precisó Tagliani.
En tanto, “los domingos no brindaremos servicios, por las mismas razones. Si consideramos la venta de los domingos anteriores, oscilaban entre 4.000 y 4.500 boletos, pero el último bajó a 800 boletos. Es muy baja la venta y no permite solventar siquiera los gastos que produce colocar unidades en recorrido”.
