Silvio Caprotti, conocido también por ser el propietario de un local bailable en cercanías de la autovía “José Gervasio Artigas”, se encontraba junto a su hijo de 17 años talando una cortina de eucaliptus cuando uno de los árboles se le cayó encima y lo aplastó.
Trabajó en el lugar personal de Criminalística, de la Brigada de Investigaciones y el médico policial de turno. Asimismo, se informó lo sucedido a la Unidad Fiscal local y se trasladó el cuerpo de Caprotti a la morgue local donde actuó el médico forense.