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El Intendente de Concepción del Uruguay, José Eduardo Lauritto (FpV), firmó un Acuerdo con Entretenimientos de la Costa por el cual se rescinde el contrato firmado en 2010. El texto dispone "extinguir el Contrato de Concesión" que unía a las partes por la cual la empresa comprometía construir y ceder la propiedad de una nueva Terminal para la ciudad y a cambio quedarse con la propiedad de la manzana de la actual Terminal y explotar por 50 años el edificio del Mercado Municipal 3 de Febrero.

Los términos del Acuerdo

Por estas horas ha habido información confusa en varios medios de comunicación, sumados a los dichos del Intendente Lauritto que en conferencia de prensa intentó resumir los alcances del acuerdo. En función de evitar esa información confusa, hay que decir que el acuerdo firmado entre las partes el pasado viernes 12 de agosto dispone:

- Extinguir el Contrato
- Dejar sin efecto la concesión a la empresa de la actual Terminal
- Dejar sin efecto la concesión a la empresa del Mercado Municipal
- Extinguir la obligación de la empresa de recuperar y poner en valor el Hotel de la Terminal
- Dejar sin efecto la obligación de la empresa de poner en valor el Mercado Municipal

Hasta ahí, los puntos por todos conocidos que retrotraen a foja cero todo el proceso que mereció la condena social y una treintena de denuncias penales contra los funcionarios que durante 2010 y 2013 avalaron la entrega del patrimonio público. Si ese fuera el final de la historia, habría sobradas razones para festejar en la comunidad de Concepción del Uruguay.

Embarrar los tantos

Sin embargo, desde la cláusula Quinta en adelante el Acuerdo entra en un terreno pantanoso que desdibuja cualquier sentido inicial. Allí se establece que "A solicitud expresa del Municipio, la Empresa manifiesta su voluntad de transferir a título gratuito a favor del Municipio la propiedad del inmueble" donde se construye la nueva Terminal, en un predio de 30 mil metros cuadrados.

También Entretenimientos de la Costa se compromete a "asumir, a su costo" las obras pendientes que quedan por realizar en la obra de la Nueva Terminal, que mereció más de 40 observaciones de obras inconclusas o pendientes de parte de la Comisión de Seguimiento.

Y agrega el compromiso de realizar las inversiones del Plan de Marketing, pagando al Municipio la suma de $4,8 milllones en efectivo a través de un convenio que fija 36 cuotas de $133.000 mensuales. En ese punto, la empresa compromete completar una inversión total de $12 millones a través de contratación publicitaria en diversos medios provinciales y nacionales. Lo que se olvidan de decir es que esos medios son de los propios socios de Entretenimientos de la Costa.

Lo que NO se dice

La cláusula Séptima deja al desnudo el único y real interés del Grupo empresario que representa Miguel Marizza: la vigencia del Acuerdo y toda la operatoria queda supeditada a que el Ministerio de Turismo considere toda esa inversión (sumados a $12 millones a invertir en marketing) como parte indivisible de los requisitos que fija la Ley de Turismo para aprobar la concesión privada del juego.

En síntesis, a cambio de la rescisión del contrato y del terreno que la empresa "regala" al Municipio, se autoriza a Entretenimientos de la Costa a incrementar su participación en el control de las maquinitas tragamonedas del Casino uruguayense.

En medio del "barullo" de cláusulas que se repiten todo el tiempo y redundan sobre cada ítem, el punto 16 deja entrever la maniobra: "La empresa? ratifica la ubicación actual de la Sala de Entretenimientos y Juegos" en la sala del actual Casino de Concepción del Uruguay. Lo que NO se estipula en el Acuerdo es que la empresa NeoGame, la real propietaria de "Entretenimientos de la Costa", se comprometa a no incrementar el número de maquinitas tragamonedas que ya explota en el Casino de la Histórica.

Abran juego
La jugada fue hecha a medida de los intereses de la empresa NeoGame, disfrazada en esta operatoria como Entretenimientos de la Costa. Como ya hemos publicado en estas páginas, la firma que explota gran parte de las Salas de Maquinitas Tragamonedas en Entre Ríos nació en Formosa, de la mano de los operadores del cuestionado Gobernador Gildo Insfrán y con la anuencia de un sector del Frente para la Victoria comandado por el exVicepresidente Amado Boudou. El operador financiero se llama Martín Cortés, y es el nexo con la Universidad Nacional de La Plata que, llamativamente, tiene a su cargo la Auditoría de las Maquinitas tragamonedas en Entre Ríos. En la lista que tiene como nexo al mismísimo Sergio Urribarri, NeoGame cerró filas en nuestra Provincia con el empresario de medios Jorge Aníbal Pérez (Canal 9, Hotel Mayorazgo) y ya controla 4 salas de maquinitas en Paraná (incluida la del Hotel Mayorazgo) la Sala de Diamante y la de Concepción del Uruguay.

Se trata de un negocio que mueve alrededor de 40 millones de recaudación neta por mes, sólo contando esas 6 salas que controla NeoGame. Con el afán de incrementar aún más esas cifras, queda a la vista que "regalar" un terreno rodeado de basura, una construcción de dudosa calidad y agregar una inversión en cómodas cuotas de $4,5 millones representan, en el volumen del negocio del juego, unos pocos meses de recaudación. Comprar el Gran Hotel y ampliar la Sala de Maquinitas no sólo no es descabellado sino que están en marchas las gestiones.

Esto es lo que tiene ante sus ojos la comunidad de Concepción del Uruguay y el real debate de lo que está en discusión en este tema, que viene disfrazado de otra cosa.

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