"Ahí empezó mi peregrinar, porque nadie me daba ninguna respuesta. Ese mismo día alguien de Vialidad, que dicen era el jefe, fue a ver el trabajo que se había hecho, pero ni siquiera preguntó si yo necesitaba algo. Tuve que contratar un abogado, porque el arreglo sale unos 170 mil pesos y yo no los tengo. Hacía poquito que había terminado de pagar la última cuota de mi auto y no puedo trabajar. Tengo un hijo que mantener y me las arreglo trabajando de chofer para otros, mientras ellos ni siquiera se presentaron a la audiencia donde pensé que, aunque sea, íbamos a llegar a un acuerdo, porque yo lo único que quiero es arreglar mi auto y trabajar", comentó angustiada la mujer.
"Todos me dicen ¨hacele juicio que lo vas a ganar¨, pero cuanto tiempo lleva eso", se preguntó Alba y reflexionó: "esa plata que me tienen que pagar sale del bolsillo de todos nosotros, porque un juicio al Estado, lo paga el Estado. Nosotros para poder circular y trabajar tenemos que pagar todo lo que indican la ordenanza y las leyes provinciales. Si no cumplimos te retienen el auto o la habilitación, tengamos viajes o no, hay que pagar. Pero nos choca una máquina de ellos y no tienen seguro y nadie responde", finalizó.