La suspendida fiscal anticorrupción comienza por explicar los alcances del fallo unánime de la Corte Suprema. Resalta que “la CSJN ha revocado la sentencia del Superior Tribunal de Justicia que se expidiera por la desestimación de nuestra acción de amparo y, al mismo tiempo, ordenó que ‘vuelvan los autos al tribunal de origen a fin de que, por quien corresponda, se dicte nueva sentencia con arreglo a lo expresado en este pronunciamiento’. Esto implica -concluye Goyeneche- que la situación en la acción de amparo se retrotrae a la existente con anterioridad a que se dictara la sentencia del STJ de fecha 09/02/2022, ahora revocada por la CSJN”.
En consecuencia, según Goyeneche, la decisión de la Corte “implica que adquiera plena operatividad y ejecutabilidad la decisión dictada en primera instancia, por la Jueza de Feria Dra. Elena Beatriz Albornoz, en fecha 25/01/1922”. ¿Y qué decidió en aquella sentencia Albornoz? Declaró “ilegítimo” el punto V de la resolución del Jury que apartó de la función acusadora al Ministerio Público Fiscal y, por ende, dispuso que “el órgano acusador ante el Jury dispuesto a la amparista Cecilia Andrea Goyeneche sea el Ministerio Público Fiscal representado por el Procurador General en los términos establecidos por el art. 11 de la Ley 9283, artículo 17 inc. f) ley 10.407 y artículo 207 de la Constitución Provincial”.
Pero el mensaje más fuerte aparece en los siguientes párrafos del escrito que Goyeneche elevó este miércoles al tribunal del Jury, allí donde dice: “Corresponde, particularmente, advertir sobre el carácter irremisiblemente nulo de cualquier resolución que se dicte en el presente, en cuyo trámite se eludió el cumplimiento de lo resuelto en aquella Sentencia de primera instancia”.
Por fuera del lenguaje técnico jurídico, todo parece indicar que Cecilia Goyeneche se atreve a aseverar que si el tribunal del Jury avanzara en una resolución que la destituya, tal sentencia sería absolutamente nula, porque, por efecto del fallo de la Corte Suprema, todo debe retroceder a febrero de 2022, y lo ocurrido de allí en más ha perdido validez.
