En la mañana del miércoles, Aguilar fue trasladado desde la Alcaidía de Tribunales a la oficina del fiscal Santiago Brugo, donde por primera vez fue formalmente imputado por las más de 20 denuncias por estafas en Paraná, de familias que contrataron y le pagaron servicios de organización de eventos, los dejó plantados y desapareció a fines de 2019.
En esta instancia, Aguilar, que es asistido por la defensora oficial Antonela Manfredi, se abstuvo de declarar, es decir, no dio ninguna explicación respecto a las numerosas acusaciones. Quizás, para aguardar que su defensa se interiorice en el expediente y así definir una estrategia.
Luego de esta breve audiencia, el imputado fue trasladado nuevamente a la Alcaidía a esperar la audiencia en la cual se discutirá una medida cautelar.
El fiscal Brugo solicitaría la prisión preventiva en la cárcel para Aguilar, debido a la sumatoria de circunstancias que fundamentan el riesgo de que el hombre se vuelva a fugar, como lo hizo durante más de dos años. La defensa posiblemente solicite la excarcelación con restricciones o una domiciliaria.
Al menos hasta ayer por la tarde, ningún damnificado se presentó en Tribunales para interiorizarse sobre el avance de la causa tras la detención de Aguilar. Tampoco hay querellantes particulares. Habrá que ver si habrá demandas civiles por parte de las víctimas que perdieron mucho dinero. Quizás algunos prefirieron olvidar y seguir adelante, luego de la tristeza que les causó ser estafados en momentos tan importantes de sus vidas; o tal vez esperarán a luego de la feria para presentarse a impulsar nuevamente que se haga justicia.
Entre ellos se encuentran los egresados 2019 de la escuela secundaria N° 5 Brigada General Zuloaga de San Benito y sus padres, una pareja que se casó en Paraná y los dejó esperando con el servicio, así como siete adolescentes terminaron con la angustia a flor de piel al verse frustrados sus cumpleaños de 15.
En Santa Fe, durante el último tiempo de su fuga, había montado una nueva empresa con idénticos fines llamada “Estilo Campo - Servicio de Lunch”. Habría rubricado unos 20 contratos pero hasta ahora no hay denuncias.