El presidente del Directorio Obrero, explicó que, de la comunicación con la Defensoría 3 de Paraná, a cargo de Martin Cabrera, y con Mauro Gieco, del Hospital Escuela de Salud Mental, “surgió la necesidad de que el nosocomio cuente con mayor dotación de sillas de rueda, por lo que desde el Banco de Prótesis de Iosper se recuperarán elementos depositados para donarles estos elementos”.
Se trata, dijo Cañete, “de resguardar el sistema solidario de salud, de ayudar a otras instituciones de salud si es posible, y en particular, de brindar cada vez más y mejores prestaciones a los afiliados”.
En el acto, directivos del Roballos recibieron ya una silla de ruedas, para destinar al uso del paciente internado Alberto Martín Ramos, mientras se encuentre en la institución.
Sin embargo, si se diera la externación del paciente, la silla de ruedas quedará en el Hospital Escuela para ser utilizada por otros internos. El contrato se suscribió por el término de cinco años.
