Tras haberse tomado conocimiento que podría tener un arma de fuego, a partir de un video que habría circulado a través de las redes sociales en donde aparecía drogándose con un revólver en sus manos, el Juzgado de Garantías de Colón ordenó el oficio.
Al parecer, este muchacho ya tenía restricción de acercamiento para con otra expareja por denuncias en su contra por violencia de género, medida que se había dispuesto pocos días antes de quedar alojado en la Jefatura Departamental de Policía.