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El caso del asesinato del joven Sebastián Briozzi, ocurrido el año pasado en Concordia, está a punto de ser elevado a juicio oral y público. Se trata de lo sucedido el 24 de septiembre del 2016, en calle Quintana a metros de 25 de Mayo, cuando un policía disparó contra un vehículo que supuestamente huía de un control de tránsito, y el balazo impactó en el cuello del conductor, quien perdió la vida poco después. Incluso se sospecha que fue "plantada" un arma de fuego en la escena del crimen para simular un enfrentamiento o justificar el disparo del policía. El fiscal Fabio Zabaletta imputó al sargento Antonio Acosta, de 31 años, quien está detenido con arresto domiciliario. La Investigación Penal Preparatoria está en su última etapa, por lo cual en breve será elevada a juicio. Rafael Briceño, el abogado que representa a la familia de Sebastián Briozzi, sostiene que se trata de "un claro caso de gatillo fácil". Como Sebastián y su hermano no llevaban armas, el letrado sospecha que el revólver que fue secuestrado en el lugar, y que fue enviado para peritar a la Gendarmería Nacional, fue "plantado" con el objetivo de minimizar la responsabilidad del funcionario que disparó.
Fuente: Diario Uno

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