En abril del pasado año, una noticia conmovió a la región cuando se supo que un joven de 28 años había matado a su padre, Roberto Juan Masetto, de 65 años, en su domicilio del Paraje Las 14.
El hombre había sido ultimado con un corte en el cuello, producido con un arma blanca. A partir de allí, la causa fue caratulada como “Homicidio calificado agravado por el vínculo”. El acusado como agresor fue detenido y asumió en su defensa técnica el abogado Ariel Monzón.
“La causa llega a juicio bajo esa caratula, que prevé una condena de prisión perpetua. A partir de allí, nosotros trabajamos en cuatro defensas alternativas, entre ellas la legítima defensa, emoción violenta, circunstancia extraordinaria o, en el último de los casos, que se plantee la causa como homicidio simple. Cada una de estas alternativas establece una condena diferente”, explicó el letrado.
Finalmente, en la mañana de este jueves el joven quedó en libertad. Si bien “aún no he sido notificado sobre cuál de estas defensas fue aceptada por el tribunal, entiendo que puede haber sido considerada la legítima defensa o la emoción violenta”, indicó Monzón.
“Siempre estos logros son una satisfacción en lo personal, sobre todo viendo la satisfacción de la madre, de los hermanos; porque fue una familia que sufrió mucho, con mucho grado de violencia ejercida por parte de quien falleció para con todos los integrantes de esa familia”, comentó el abogado defensor.
Reveló que "en el juicio se comprobó que el fallecido tuvo dos intentos de matar a su mujer, en donde hay registros de que estuvo internada en terapia intensiva. Al chico mismo que estaba detenido siempre lo agredió, desde los cinco años cuando un tío lo salvó de que su padre lo ahogara dentro de un balde, pero la Justicia jamás actuó contra el padre”.
Para concluir, Monzón remarcó que “el Ministerio Público tiene posibilidades de apelación, si así lo considera, para intentar comenzar con un nuevo planteo”.
