El Intendente de Basavilbaso en ocasión de hacer uso de la palabra dijo no guardar resentimiento alguno contra quien atacó de manera tan temeraria su propiedad, acaso sin pensar que el incendio pudo costar vidas humanas, pero que tenía la firme convicción de que una sociedad se construye sin violencia, y que su gesto de acceder a una tramitación judicial breve del caso ayudaría a su familia y también al victimario.
En la sentencia, se impone a Medina que se "abstenga de mantener cualquier tipo de contacto personal, telefónico, vía Internet y/o por interpósitas personas, etc., con la víctima, Gustavo Hein y su grupo familiar constituido por su esposa Gretel Kint y sus hijas Tatiana y Candelaria", así como también "acercarse a la residencia (de la familia Hein) en un radio de 200 metros". Asimismo, también se le ordenan medidas restrictivas respecto de los testigos.