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"Hola Ana Clara, le escribe Mauricio Macri. Me comentaron del proceso civil en tiempo record, sólo 1 año. Felicitaciones por esto, es una gran noticia que estén incorporando la oralidad en los juicios. Un saludo a usted a sus colegas". Con ese mensaje de WhatsApp, el Presidente de la Nación felicitó a la jueza de Gualeguaychú Ana Clara Pauletti por los resultados del proyecto Oralidad Efectiva, que, junto a las juezas de Paraná, Valentina Ramírez Amable y Andrea Morales, coordina desde junio del año pasado.

El caso que batió todos los records respecto a la duración de los litigios judiciales fue el de una docente gualeya contra una telefónica por el traslado de la línea: en menos de un año se llegó a la primera sentencia –demanda, contestación, pruebas, etc.–, en la que se benefició a la demandante –lo que fue apelado por la empresa– y a la confirmación de la Cámara. Si se considera que los tiempos promedios de la Justicia Civil en este tipo de casos era de 3 años y 8 meses, se comprende el halago presidencial.

“Si bien es un dato a destacar, no solamente es importante bajar los tiempos de duración de los trámites, que realmente afectan al ciudadano y a la legitimidad del sistema judicial, también se busca que la sentencia sea de calidad. El juez, al estar a cargo del proceso desde el primer momento, sin delegación, logra que se avance rápido y eficazmente, sin trámites de más, y así poder dictar una sentencia justa y de calidad en poco tiempo”, explicó Ana Clara Pauletti al diario El Día.

“El proceso empieza con escritos: la demanda y la contestación siguen siendo en papel. Luego viene la audiencia preliminar y la vista de causas –a la que concurren las partes, los peritos y los testigos–; en ambas audiencias está presente el juez y se videofilman. La presencia del juez es condición de validez de estas audiencias”, indicó la funcionaria. Al tiempo que celebró la “transparencia y publicidad” del nuevo sistema.

“La gran diferencia es que las audiencias ahora son tomadas por el juez y son videofilmadas. Esto implica un cambio cualitativo, no solamente para la primera instancia sino también para la instancia de apelación, que es donde yo trabajo”, agregó Pauletti.

“Nosotros ya no leemos un acta, que no sabemos si es literalmente fiel de lo que se dijo en la audiencia, ahora vemos un video. Por lo que tenemos una aproximación mayor a la prueba y, por lo tanto, podemos hacer una mejor valoración probatoria: vemos los videos y evaluamos si coincidimos con lo que el juez interpretó”, remarcó la jueza local sobre el nuevo sistema de oralidad, sostenido en dos herramientas tecnológicas indispensables: el software de gestión de audiencias y la videofilmación.

Tanto el demandante como el demandado, junto a sus abogados, están presente ante el juez. Ellos mismos son quienes expresan sus intereses ante el magistrado. “Eso hace a nuestra legitimación como justicia –continúa Pauletti–, el ciudadano ve el despliegue del juez, que previamente estudió la causa y llega a una sentencia entendible para el ciudadano, quien debe saber por qué perdió o por qué gano”.

“El ciudadano es parte de todo el proceso, lo que hace mucho más factible que acepte la sentencia, o entienda por qué fue ese el resultado”, explicó, con pedagogía docente, Pauletti. Y reconoció que “uno de los grandes males que tiene la justicia civil ha sido su lentitud”, por lo que “son importantes este tipo de proyectos”.

Por último, sobre el saludo del presidente Macri, la funcionaria dijo que “más allá del halago, sirve para visibilizar y profundizar este proyecto, detrás del cual hay mucho esfuerzo. Es un cambio de paradigma en la forma de trabajar de jueces y abogados. Venimos de la época de la carreta y vamos hacia el siglo XXI”.
Financiamiento y resultados
La Oralidad Efectiva en la provincia fue iniciativa del presidente del Superior Tribunal de Justicia (STJ), Emilio Castrillón. Con la experiencia de este procedimiento en Buenos Aires, las magistradas entrerrianas se capacitaron en esa provincia. Y el rol del Ministerio de Justicia de la Nación fue fundamental, en cuanto a lo estratégico y a lo económico, ya que el software de gestión de audiencias y videofilmación fue brindado por la Cartera nacional.

En tanto, STJ entrerriano resolvió extender esta metodología –afectaba, en principio, al fuero civil– al fuero de Familia y al Laboral, con fondos propios. Asimismo, a partir del trabajo hecho en Entre Ríos, Pauletti capacitó en oralidad a jueces en Misiones, Córdoba, San Juan y Corrientes.
Fuente: El Día

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