El entrerriano arrancó su 16ª temporada con la firmeza y la contundencia que lo caracterizaron en los últimos torneos, donde logró 2 títulos al hilo en 2020 y 2021 y el subcampeonato en 2022. El piloto del Ford Nº2 se llevó los 47 puntos en juego después de ganar la clasificación, serie y Final.
Pero no la tuvo fácil, especialmente el domingo. Porque Rossi ganó la serie más rápida y por primera vez desde su llegada a Toyota largó adelante la 1ª carrera del año. Tal fue la contundencia que mostró el piloto de Del Viso, que obligó al equipo de Werner a meter mano en el Ford. “Nos sorprendió el rendimiento de Matías, por eso no nos quedamos quietos”, reconoció en la previa a la final.
Los cambios surgieron efecto. Porque después de perseguirlo en los primeros giros, logró superarlo en la 5ª vuelta. Una maniobra que a Rossi le costó otro puesto más porque fue superado por Julián Santero (Ford). A partir de allí, Werner empezó a marcar el ritmo, favorecido en parte por la lucha entre Santero y Rossi.
Hasta que Rossi no solo pudo superar a Santero (que abandonó unos giros más tarde) sino también a Werner demostrando que su Toyota tenía mejor ritmo que el Ford. Sin embargo, a solo 3 giros del final, el motor Cherokee le jugó una mala pasada y lo obligó a abandonar, dejándolo a las puertas de un resultado que hubiera sido histórico.
“Heredamos la victoria. Me encontré con un auto de Rossi en gran nivel. Yo no sé si Matías tuvo algún problema en las primeras vueltas. Cuando lo superé es como que salió lento antes de la curva 5. Después no pensé que me iba a atacar tanto, pero en ritmo él tenía un auto superior. Pero nada de llorar, hay que trabajar”, dijo Mariano que ya tiene el triunfo habilitante para pelear la corona.
