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"En todo el año no recibimos ni un peso para limpieza, así que tenemos que sacar de lo que nos dan para la copa de leche para comprar lavandina", comentó el vicerrector de una escuela secundaria de Paraná. El panorama se repite en varios establecimientos: la plata que reciben del Estado para sostener los comedores no alcanza.

"Los gurises esperan la factura, o la manzana. Saben que hasta el mes que viene seguirán con galleta, únicamente, porque la fruta ya no se compra y verán factura sólo una vez al mes. Esta es la realidad de nuestras escuelas a la hora de la copa de leche. A pesar de los anuncios y las promesas, la situación en los comedores escolares empeora y el hambre de nuestros alumnos se agrava con el frío y la inflación", dice un informe que acaba de dar a conocer la seccional Paraná de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer).

Algunos números para tener en cuenta


El último aumento que recibieron los comedores fue en abril.

Así, en el primer tramo de la partida, el monto que va hasta los primeros 100 niños, pasó de $7 a $10 por día y por chico. El segundo tramo, desde 101 a 200 chicos, subió de $6,75 a $9,75; y el tercer tramo, desde 201 en adelante, se modificó de $6,50 a $9,50.

La última cifra oficial indica que mientras en 2014 había 84.681 chicos en comedores, en diciembre la cifra había aumentado a más de 85.000.

Las partidas para los comedores no se modificaban desde mayo de 2015.

El último incremento, a juicio de Agmer Paraná, no alcanzó a recomponer el desfase, y la desactualización producto de la inflación.

De las frutas y los cereales, a la galleta


"Los chicos necesitan del comedor y cada vez se ven más pibes descompuestos porque pasaron dos o más días sin comer, situación que empeora los lunes y, sobre todo en el turno tarde –dicen desde el sindicato–. En las escuelas se hacen milagros con las partidas. Una escuela secundaria que brinda la copa de leche, recibe una partida para 100 alumnos, pero son 500 los pibes que son asistidos y en Comedores no lo aumentan", remarcaron.

Detallaron que "en una escuela Nina con 200 chicos en el comedor están viendo cómo se va deteriorando la calidad de la comida ante el aumento del precio del gas, que se paga con la misma partida. Otra escuela primaria con copa de leche para 500 alumnos, hasta el año pasado variaba entre frutas, facturas, barras de cereales, yogurt, etcétera. Ahora, ofrecen una galleta todos los días y dos veces al mes, una torta negra. Son varias las escuelas primarias que aportan algunos platos de comida caliente para 20 o 30 ex alumnos de la secundaria vecina".

"Así golpea a nuestras escuela el ajuste que viene desde la Nación y cuenta con el acuerdo del gobierno provincial. De los casi 345 millones de pesos que el presupuesto educativo 2016 prevé para gastos operativos (Bienes de uso, Servicios no personales y Bienes de consumo), 191 mil millones (55%) dependen de las transferencias de la Nación; las que están suspendidas desde que comenzó la presidencia de Macri –señaló Agmer Paraná–.

Tampoco alcanza para la limpieza


"Con las partidas de limpieza ocurre lo mismo. Hace más de un mes que desde el Gobierno provincial anunciaron que aumentarían el monto y pagarían la totalidad correspondiente a 2016. Hasta ahora, esto no ocurrió y aunque ocurriera, seguiría siendo insuficiente", lamentaron.

"La escuela que pide desinfección, fumigación o limpieza de tanques, debe comprar los productos necesarios, además de los guantes y barbijos para el personal de la cuadrilla. Así, el estado incumple con todos los puntos acordados en la paritaria de infraestructura de 2012. De este modo, no hay condiciones para afrontar el brote de gripe A, ni garantizar las condiciones de salubridad de nuestras escuelas", concluyeron.
Fuente: Entre Ríos Ahora

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