Desde el 7 de enero, el hogar se encuentra cerrado a causa de la imposibilidad de cancelar la deuda salarial con sus empleados, que sería consecuencia de los atrasos en el pago por parte de las obras sociales. Al respecto, el gerente de Administración de Iosper, Arnoldo Schmidt, señaló que la obra social provincial “no tiene convenio” prestacional con la cooperadora y que solo hay una relación a través de afiliados que envían a sus hijos a la institución y presentan facturas por atención, que luego se paga por reintegro a la cuenta sueldo.
Pero, señalaron, esos pagos “están al día”. En octubre, la obra social provincial pagó un monto de $814.034.82 en concepto de reintegros a afiliados que presentaron facturas de San Francisco de Asís; en noviembre, la suma fue la misma: $814.034,82. «Las prestaciones se pagan a mes vencido –apuntó Schmidt– por lo cual las prestaciones de diciembre no están pagas, por cuanto se presentan en enero y se pagan a los 45 días».
Deuda millonaria
Desde la Cooperadora San Francisco manifestaron que la obra social tiene una deuda con la institución que supera el millón de pesos.En diciembre, el complejo que conforman la Escuela de Educación Integral N° 9 San Francisco de Asís, el Hogar de Día y el Pequeño Hogar –una residencia casi permanente, de lunes a viernes, que hasta diciembre acogía a 4 personas de extrema vulnerabilidad– necesitó una suma de $9 millones al mes para funcionar. El 87% de ese monto se va en el pago de sueldos y cargas sociales.
El desfase financiero que soportan ha trastocado toda la organización administrativa de la Cooperadora. La razón es que se cortó la cadena de pagos y el detonante resultó el desbarajuste que provocó el gobierno de Mauricio Macri al distraer recursos que se destinaban a la atención de las personas con discapacidad al disolver la Agencia Nacional de Discapacidad.
Esa decisión administrativa tuvo un efecto dominó en instituciones que asisten a personas con discapacidad y se sostienen con el aporte de la Nación. El Programa Federal Incluir Salud se pensó como una obra social para personas sin cobertura social: el Estado le paga a la institución, en este caso el Hogar San Francisco de Asís, por cada persona que debe asistir y que carece de obra social.
Pero desde hace dos años los pagos se empezaron a retrasar y hoy el Programa Federal Incluir Salud tiene una deuda de $ 6 millones con la Asociación Cooperadora del Hogar San Francisco de Asís.
La otra deuda importante es del Instituto Obra Social de la Provincia de Entre Ríos (Iosper), unos $3,7 millones. Pero con Iosper hay una peculiaridad: como no hay convenio prestacional –a pesar de que en 2017 pidieron que se firmara un acuerdo–, los papás que envían a sus hijos al Hogar San Francisco piden factura y la presentan en la obra social para el reintegro, una transacción que suele ser azarosa.
Sin embargo, Iosper afirma que ha depositado en las cuentas de sus afiliados todos los reintegros puestos al cobro. Y que sólo resta cancelar diciembre.
