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Oscar Alfredo Locher volvió a la dirección técnica a principios de 2018 y, en apenas un año y medio, logró repetir lo conseguido en 1997 con Club Santa Rosa: ser campeón invicto. El entrenador fue entrevistado en “Deportes 12” (lunes a viernes a las 20) de Radio 12 FM 89.1 - www.radiodoce.com, la emisora de El Entre Ríos en la ciudad, donde contó las claves del éxito, pero también habló de la actualidad que atraviesa el fútbol local.
Pasado ganador
Nunca pensé repetir lo del ’97 con este club, ser campeón invicto. Aquella vez se jugó un torneo largo con 22 partidos y fue el segundo título de la institución. Mario Romero era el presidente y teníamos un equipo bárbaro con Carlitos Scheffler, Claudio Zalazar, un joven “Peca” Mengeón, y la delantera con Gustavo “Chicharra” Bordet y Jorge Ríos, entre otros grandes jugadores.

Anteriormente, recuerdo, en el ’90, fue el primer campeonato de Santa Rosa que lo peleó palmo a palmo con el CAVE, equipo al cual yo dirigía y se había armado con varias figuras como “Maca” Martínez, “Coca” Pestaña y Carlos Casares de Uruguay, porque era el año del bicentenario. Perdimos 1-0 el partido decisivo en el polideportivo, donde hacía de local un Santa Rosa fantástico dirigido por Oscar Brelaz.
Cerca en 2018
Después que dejé de trabajar como captador de talentos para Boca, anduve siempre a la vuelta del fútbol local y no pensaba volver a dirigir. Pero el año pasado cayeron en casa Antonio y Diego Ledesma y me convencieron de agarrar Santa Rosa. Asumí cumplidas algunas fechas del Apertura, después de la ida de Matías Atún, quien había iniciado un proyecto distinto, más a largo plazo, pero los resultados no se le dieron. Hicimos un gran Clausura y en los Play Off llegamos a la final, perdiendo con Achirense, pero haciendo buenos partidos.
Así armó el campeón
Siempre me caractericé por armar los equipos de atrás para adelante, formando una defensa firme y con jugadores que cumplan primordialmente esa función. Generalmente utilicé un 4-4-2, con alguna excepción en la que paré a Giglio de enganche cuando se sumó Brian Coronel en el ataque.

La pegada de Guerrero y el faro de ataque que significa Benítez permite que nos salga fácil hacer un juego directo. Claudio es un jugador completo, que tiene mucha calidad y desgasta a la defensa, con eso le genera espacios a sus compañeros. Su llegada fue clave, metió 8 goles en 12 partidos.
Continuar el proyecto
Ahora se vienen las elecciones en el club, Antonio Ledesma seguramente va a dejar la presidencia y dependerá de lo que se decida para ver qué se hace, aunque hay una camada joven de nuevos dirigentes que empujan y tienen muchas ganas.

Personalmente creo que a excepción de Achirense o DEPRO, que económicamente están muy por encima, el resto de los clubes no estamos en condiciones de jugar el Regional. Lo ideal para darle continuidad a este proyecto es participar de la Copa Entre Ríos. Está el ejemplo de San Jorge, que con un equipo propio llegó a semifinales y perdió contra Atlético Uruguay, que fue campeón. Los equipos que peleamos el título acá estamos a la altura de ser competitivos en ese torneo.

Los jugadores tienen el deseo de jugar el Torneo Regional, pero historias como las de Sauce en el ’86 son muy difíciles de repetir. En aquel momento y en plena euforia, recuerdo haber sido políticamente incorrecto al decir que un equipo del departamento Colón estaba lejos de jugar una categoría profesional.
Su visión del fútbol local
Pienso que hay que cuidar el torneo local y es un debate que debemos darnos todos los protagonistas. En aquel momento de Sauce del ‘86/87, el campeonato no comenzó hasta terminar la campaña y eso no le hizo bien a la Liga. También recuerdo la época dorada de la vieja Fórmula Entrerriana, cuando a los partidos íbamos los 11 jugadores y los técnicos. Y comparo lo que pasó con esa categoría, que se fue acabando en la medida que desaparecieron los talleres y los pilotos de la zona. Hoy hay mucha diferencia entre dos o tres clubes y el resto, algunos se solventan vendiendo pollos o empanadas. También hay que observar lo que pasa en el fútbol infantil, hay hijos de exjugadores que hicieron historia en un club, viven a una cuadra y están jugando en otros clubes. No tiene sentido. Debemos replantearnos un montón de cuestiones y eso es responsabilidad, principalmente, de todos los dirigentes.
Fuente: El Entre Ríos y Radio 12

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