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A propósito del aniversario del programa “Otra Sudestada” (que se emite por Radio Franca desde hace 12 años), el actual Ministro de Educación, Deportes y Prevención de Adicciones, José Eduardo Lauritto abordó la cuestión sin rodeos: “lo que nos debe preocupar es que los dos frigoríficos que están con mayores dificultades son de Concepción del Uruguay”, reconoció el funcionario uruguayense. Además, reclamó: “seamos sinceros, nosotros tenemos que valorar a los empresarios que hoy tiene la ciudad. Tenemos que hacer todo lo posible para que la empresa salga adelante, porque por lo menos esta empresa reinvierte en la ciudad, son empresarios locales. Y la verdad es que no conocemos a los dueños de los bancos, ni a las cadenas de electrodomésticos que se están llevando, en el buen sentido y quizá con la ley en la mano, el dinero de la ciudad”, destacó el Ministro.

Frigoríficos en problemas
La afirmación de Lauritto reconociendo la gravedad del problema se condice con el complicado escenario que atraviesa la cadena avícola. Los despidos en el frigorífico Fepasa y la reducción horaria en la firma Súper S.A. dejan a la deriva a más de 1000 familias que dependen de esa actividad para el sustento diario.

El sector avícola es la principal fuente de empleo de Concepción del Uruguay con cerca de 1500 puestos de trabajo directos, y además cuenta con una escala salarial de las más altas de la ciudad con remuneraciones que alcanzaron los $4.000 por quincena antes de la crisis.

A raíz de la caída de los precios internacionales y los problemas de administración propios de algunas empresas en particular, las firmas avícolas comenzaron con diversas medidas destinadas a achicar gastos. El impacto más fuerte fue en el rubor “sueldos”, con el despido de personal en el caso del frigorífico Fepasa y la reducción horaria que se incrementó en estas últimas semanas en el frigorífico Súper S.A.

La mirada de la política
A propósito del fuerte impacto que la actividad avícola tiene sobre la economía de Concepción del Uruguay, la dirigencia política local comienza a preocuparse cada vez más por la situación. En la última semana el que se refirió al tema fue el actual ministro de Educación, José Lauritto. En diálogo con Radio Franca, el exintendente uruguayense consideró que “el sector no atraviesa por un buen momento. Pero lo que nos debe preocupar es que los dos frigoríficos que están con mayores dificultades son de Concepción del Uruguay”, reflexionó, en referencia al frigorífico Súper S. A. que cuenta actualmente con 497 trabajadores, y Fepasa que atraviesa un complicado Concurso Preventivo de Acreedores con más de 60 millones de pesos en cheques sin fondos.

Frente al delicado panorama, a comienzos de este mes los empresarios de Súper requirieron una reunión con las autoridades para evaluar la situación. De este modo mantuvieron una serie de reuniones de las que participó el intendente Carlos Schepens, el Ministro de Gobierno Adan Bahl, el ministro Lauritto y representantes de los sindicatos del personal de la industria de la Carne.

El cónclave evidencia el enorme grado de preocupación que existe en la dirigencia local que busca auxiliar financieramente a las empresas avícolas para evitar que el desempleo crezca en Concepción del Uruguay tras los más de 100 despidos y renuncias en Fepasa y la dificultad que existe para generar nuevos emprendimientos.

¿Sin soluciones a la vista?
Por eso Lauritto y la dirigencia local son conscientes que “la verdad, yo creo que es una situación que nos debe preocupar, y nos debe preocupar en serio”, comentó. El ministro tiene claro que “la situación de dos frigoríficos avícolas es demasiado fuerte para nosotros”.

Lauritto también aseguró que las soluciones que se requieren no son simples: “La situación no es sencilla”, comentó, para remarcar que “si bien el martes anterior (desde la empresa) lograron un financiamiento de la AFIP (para refinanciar la deuda) hoy lo que están necesitando es un financiamiento para los insumos centrales como es el alimento” para pollos.

Mientras esto sucede, el segundo frigorífico avícola de Concepción del Uruguay en problemas redujo considerablemente el nivel de faena, reduciendo la producción de unos 70 mil pollos diarios a apenas unos 50 mil cada tres días. Esta caída de la faena se corresponde con la drástica reducción de los turnos de trabajo, que pasaron de ocho horas diarias a turnos parciales de cuatro horas durante apenas tres días a la semana. Y de la mano de esta reducción horaria también sobrevino el recorte de los salarios de los trabajadores que hoy viven con preocupación la incertidumbre por la que atraviesa la realidad de los frigoríficos.

La ausencia de nuevas inversiones que prometan generar empleo completa el complicado panorama de Concepción del Uruguay.
Fuente: El Entre Ríos (edición impresa)

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