Atención

Esta imágen puede herir
su sensibilidad

Ver foto

Compartir imagen

Agrandar imagen
“Ahora estoy un poco mejor, pero no me fue nada bien hoy”.

Quien se dispone a hacer el relato de lo vivido en la madrugada de este miércoles es María Elena Jacquet, 60 años de edad, empleada municipal de Colón.

Desde hace más de una década sale de su casa en el Barrio 20 Viviendas, para recorrer a pie más de 30 cuadras hasta la sede de la dirección de Cultura ubicada en Laprida y Moreno, donde cumple funciones.

“No tengo miedo porque estoy acostumbrada. Está todo iluminado e incluso las veces que hubo tormenta he ido sin luz”, cuenta a El Entre Ríos.

Pero esta vez la historia fue otra. Recuerda que alrededor de las 4.35 “iba por el cordón cuneta de calle San Martín, había otras personas caminando, y veo una moto grande de color azul que cruzó por calle Pte. Illia con dos personas”.

“Cuando llego ahí, aparece la moto de atrás a toda velocidad, sin hacer nada de ruido y pasando por encima de las bolsas de basura que ya había amontonado el recolector. En un segundo, de un tirón, me arrebató el bolso que llevaba colgado en el brazo izquierdo; no sé si la manija la cortó con algo, porque quedó sobre la basura y se llevaron el bolso”.

“Empecé a insultarlos a los gritos. Había un auto que se fue y le pedí a un muchacho que llame a la Policía pero no pudo comunicarse, así que me fui corriendo hasta la jefatura”.
De negro y con pasamontañas
Sobre los delincuentes, precisa: “Estaban vestidos de negro, con pasamontañas y guantes negros. Iba uno delgado atrás y uno corpulento adelante”.

“En diciembre estuve visitando familiares en Rosario, Santa Fe y vi un asalto similar. Yo viajo a ciudades grandes, pero es la primera vez que me asaltan así”.

Y añade: “Después nos enteramos que a los 10 minutos le quisieron robar a una mujer por Av. Perón”.

Repasando lo ocurrido, reitera entre los puntos que le llamaron la atención, la velocidad, lo silencioso del andar de la moto pese a ser de grandes cilindradas y lo certero del ataque.

“Se nota que son profesionales, y no eran chicos sino personas grandes”, dice la víctima, a la vez de señalar su sospecha de que “no son de acá”.
Un rosario, una agenda y las fotos de sus nietos
Hablando del saldo del hecho, María Elena destaca como positivo que no sufrió ningún tipo de golpe o herida. También que “en la jefatura me atendieron muy bien. Vinieron los de Investigaciones y vimos las cámaras”, y “el llamado del intendente y los concejales”.

Lo que más lamenta es que los delincuentes se hayan llevado valiosos recuerdos, sus documentos y varias pertenencias que necesita en el día a día.

“Me robaron el teléfono, el cargador, un poco de dinero, los recibos de sueldo, documentación, los anteojos recetados que me hice hace poco y me salieron caros; también los de sol. Y cosas que me duelen mucho, como un rosario que era de mi madre y una agenda con un montón de datos, que la había sacado del bolso pero justo hoy la puse. En el celular tengo todas las fotos y videos de mis nietos, desde chiquitos”.

Pide que si alguien encuentra sus documentos o si sabe algo de alguna de sus pertenencias, se comuniquen al número de su hija: 3447 57-4029
Fuente: El Entre Ríos

Enviá tu comentario