Las tareas se desarrollaron en el marco del Programa de Conservación y Protección de la Fauna Íctica y los Recursos Pesqueros en el Río Uruguay. En este caso puntual, se trató de la marcación de grandes peces migratorios y se hizo foco en las concentraciones de individuos de la especie surubí pintado (Pseudoplatystoma corruscans) en el área de veda total de pesca en la parte inferior del curso de agua, próxima a la localidad de Puerto Yeruá (Concordia), la cual fue establecida por CARU según Resolución Nº 29/2007.
Las actividades se concentraron en marcaciones intensivas y prospecciones hidroacústicas de surubí pintado. El trabajo fue llevado a cabo por la Secretaría Técnica de la CARU, con la colaboración de la Municipalidad de Puerto Yeruá, el Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero de la Argentina (INIDEP) y la Dirección Nacional de Recursos Acuáticos de la República Oriental del Uruguay (DINARA) y organizaciones intermedias, con la participación de guías y pescadores deportivos de Uruguay y Argentina.
La cantidad de surubíes marcados en 2023 fue de 264, que sumados a los 300 que se registraron y marcaron el año pasado se llegó a las 564 marcaciones en total.
La marca aplicada es un dardo plástico numerado de color verde o amarillo que no tiene capacidad de emitir señales, por lo cual desde la CARU solicitaron ayuda de la comunidad para determinar la localización del pez.
“Si usted captura un pez con esta marca, CARU solicita que nos lo haga saber transmitiéndonos la información acerca de la fecha y el lugar de captura, consignando datos personales y dirección ingresando en la página www.caru.org.uy o comunicándose por WhatsApp al teléfono +598 92773709”, indicaron desde la Secretaría Técnica del organismo binacional.
“Si libera el pez, se solicita que se tome una fotografía de la marca con el detalle del número y registre un video de la liberación. En caso de que la pieza no sea devuelta al agua, conserve la marca”, agregaron.
Una vez brindada la información, en ambos casos desde la CARU le harán llegar una recompensa de U$S 15. “La participación de la comunidad en general y de los pescadores en particular es fundamental, porque toda información que nos comparten ayuda a conocer y conservar los recursos pesqueros del río”, concluyeron.
