El profesional, de apellido Castillo, llegó hasta el nosocomio a cumplir con su guardia y tras dejar el rodado, se dirigió al departamento médico ubicado en el primer piso, donde dejó sobre una cama una mochila que contenía sus pertenencias, entre las cuales estaban las llaves del auto.
En la mañana de este viernes, a las 8, cuando el médico se disponía a retirarse del hospital, no encuentra las llaves de su vehículo y se dirige rápidamente hacia el estacionamiento para corroborar que también faltaba su Fiat Palio Adventure.
El profesional estima que la sustracción de las llaves pudo haber ocurrido entre las 21 y las 23, puesto que en ese lapso de tiempo no hubo nadie en la sala de médicos.
Por otra parte, trascendió que las cámaras de seguridad que están instaladas en ese sector del nosocomio no estarían funcionando.
Tras la denuncia, intervino la División Sustracción Automotores.
