Todo comenzó cuando las autoridades policiales fueron advertidas, a través de la alarma disparada por el sistema de "Botón de Pánico" de una mujer víctima de violencia, el cual le fuera oportunamente entregado por la Justicia.
El agresor, de 29 años, sobre quien pesaba una restricción perimetral, violó la medida, forzó la puerta de entrada e intentó agredir a la víctima, pero se dio a la fuga al escuchar el móvil policial.
Los efectivos de la fuerza lograron detenerlo a escasos 20 metros de la vivienda, bajo los cargos de desobediencia judicial y fue puesto a disposición de la Fiscalía.
