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Otros tiempos de Mazurier
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Otros tiempos de Mazurier
La audiencia de la Causa Hotel Ayuí - Codesal ante el Juez Alberto Funes Palacios deparó varias sorpresas. El Fiscal Aníbal Lafourcade incorporó a las pruebas nuevos datos que complicarían aún más la situación del imputado, mientras que Luis Alberto Mazurier se defendió ventilando "fricciones" con el anterior gobierno provincial y negociaciones con el actual, tan sorprendentes como inconclusas.

Antes de decidir que la inhibición de bienes que pesa sobre Mazurier se extienda por 5 meses más, el magistrado Funes Palacios pidió a la acusación y a la defensa que resumieran sus planteos. El fuego cruzado no se hizo esperar.

"Ni un quiosquero maneja su contabilidad como manejó el Señor Mazurier la CODESAL durante 11 años" se escuchó decir al Fiscal. El exfuncionario y Director del Diario El Sol contraatacó: "Esto es una gran farsa". Y redobló la apuesta: "El dinero faltante es de mis bienes y no de los bienes de la provincia".

Ostentación de impunidad


Las primeras frases fuertes de la audiencia partieron del Ministerio Público Fiscal. Lafourcade apeló a comparaciones para explicar por qué no le fue posible "determinar" con precisión cuánto dinero habría recaudado la Corporación para el Desarrollo de Salto Grande en los distintos emprendimientos bajo su dominio, como el camping La Tortuga Alegre, las Termas del Ayuí y las de Punta Viracho.

"Sarli (el abogado defensor de Mazurier) dice que no está acreditado el faltante, que no están acreditados los montos, señor Juez. ¿Y por qué no están acreditados? No inscribieron a la Codesal en la AFIP, para manejarla como que fuera una huerta. ¿Vio las personas que tienen una huerta y la manejan sin factura, sin nada, y venden la verdura como quieren y cobran lo que quieren? Eso se hizo durante 11 años en la CODESAL", disparó Lafourcade.

"No estamos acá porque operaron un bolichito"


Más adelante, insistió: "Le asiste razón al Doctor Sarli, pero por lo bizarro, por la ostentación de impunidad. Esto es vergonzoso, es bochornoso. ¿Cómo vamos a saber los montos si se manejaba a gusto y piacere? Ni un quiosquero maneja su contabilidad como manejó el Señor Mazurier la CODESAL durante 11 años".

"No sabemos cuánto fue el defalco. ¿Por qué? Por el carnaval de violaciones de normas", remarcó el Fiscal. "¿Sabe lo que dijo el Tribunal de Cuentas? Que se violaban normas impositivas, normas laborales, normas de la registración laboral y de las responsabilidades ante AFIP por cargas sociales. Se estuvo operando cuatro años las Termas del Perilago con unos talonarios de tickets que dan vergüenza".

"Las termas -reiteró- no son un quiosquito al que le entran dos pesitos; el hotel tampoco. No estamos acá porque operaron un bolichito. Operaron un hotel cuatro años ilegalmente, la Tortuga Alegre 11 años y 5 años las termas", remarcó.

Habló Bacigalupe y complicó a Mazurier


Pero Lafourcade fue más allá todavía, al aportar nuevas pruebas, que se suman a las ya expuestas en la anterior audiencia ante el Juez Darío Perroud.

"Después de la audiencia -contó el Fiscal- le tomé una entrevista al Doctor Enrique Oscar Bacigalupe, que era el dueño mayoritario de Balace SRL. ¿Sabe con quién negoció la venta de las cuotas partes? ¿Qué dijo el Señor Bacigalupe? 'Negocié con Luis Mazurier, que después me trajo a los otros', dijo Bacigalupe".

Para el Ministerio Público Fiscal, el testimonio del abogado expropietario de la empresa concesionaria del Hotel Ayuí refuerza una de las principales acusaciones contra Mazurier: que apeló a prestanombres -en especial, a Alberto Jesús Villanueva, ex encargado de cantinas de la Codesal- para apropiarse del complejo hotelero.

"El señor Villanueva, Cintia Mengeon (pareja de Mazurier), Balace SRL y Fideinsa (una sociedad anónima constituida en Buenos Aires para administrar hoteles) son Mazurier", resumió Lafourcade, que asegura contar con pruebas suficientes para poner en evidencia las maniobras llevadas adelante por el expresidente de la Codesal para quedarse con el Ayuí Resort. El Fiscal también dijo disponer de nueva información, de la cual se desprende que "el señor Mazurier compró, en la quiebra de Cormio, una quinta de 35 hectáreas, en comisión. ¿A nombre de quién? De FIDEINSA, que fue la primer sociedad, que ni siquiera tiene CUIT. Tiene el nombre, se anotó en personas jurídicas de la Capital Federal".

Para el ministerio público fiscal, el dato no hace más que ratificar que tanto la venta de acciones de Balace SRL a Villanueva como la constitución de la sociedad anónima FIDEINSA fueron todos hechos orquestados por el Director del Diario El Sol para desembarcar en el Hotel Ayuí, usándolo a Villanueva como prestanombre y poniendo como gerente a su pareja, Cintia Mengeón.

Mazurier: "La provincia me debe"
Es común que los acusados griten su inocencia. Pero Luis Mazurier va mucho más allá.

En efecto, el exfuncionario con rango de ministro y Director del Diario El Sol se presenta como una víctima que sacrificó su patrimonio en bien de la provincia, que donó bienes al Estado y sacó dinero de su bolsillo y de la sucesión de su madre para paliar obligaciones de las que debía hacerse cargo la administración pública.

"El actual gobernador ordenó una compulsa sobre la contabilidad de la Codesal, en la que se demuestra que la Provincia me debe", reveló Mazurier. "Yo no sé cuánta cantidad, pero yo sé que era mucha la plata que yo puse. Yo no saqué ni un centavo. Al contrario, estuve poniendo plata", insistió.

De ser cierto lo que cuenta el expresidente de la Codesal, resulta incomprensible cómo ni el gobernador Gustavo Bordet ni la Contaduría General de la Provincia de Entre Ríos no han puesto aún a disposición de la Justicia la documentación de la presunta "compulsa".

El expresidente de la Codesal dice haber donado el terreno -comprado en un remate- y la sede de CODESAL en calle Cadario; las cantinas del Perilago; todos los baños en las playas y la Comisaría Novena completa. "Fíjese Usted -le dijo al Juez- que si yo dono y después voy y robo una cosita así, o no presenté un papel". . .

En otro tramo, volvió a ventilar sus diálogos con el gobernador Bordet:

"Yo he puesto plata y eso lo sabían todos en el gobierno y por eso Bordet mandó la compulsa. Esa compulsa no estuvo terminada pero ya había una aproximación. ¿Por qué no estuvo terminada? Porque Bordet decía que si yo había construido, por ejemplo, la comisaría, con bienes propios, correspondía que la provincia me la pague. Yo le decía 'no, mirá, dejá, eso ya está, listo, me conformo con recuperar el dinero en efectivo que puse y no lo que yo ya doné'. 'Sí, pero la provincia no aceptó la donación'. . . No importa. . .".

"Acá el Fiscal está diciendo que se recibió dinero, pero no dice qué salió", reprochó Mazurier a Lafourcade. Y agregó: "Faltaban, por ejemplo, 100.000 pesos para pagar al personal y yo tenía que buscar la plata de donde sea y darle para que no haya problemas".

¿Y de dónde sacaba Mazurier tanto dinero para cubrir obligaciones del Estado entrerriano?

También tuvo una explicación para eso: "La sucesión de mi madre yo la puse toda en esta cuestión. Ocupé parte de la sucesión, el 99% de mi hermana también, que me la prestó para que yo cubra las deudas que tenía un organismo público".

En varios tramos de su exposición, Mazurier culpó a la gestión de Sergio Urribarri por haber abandonado a su suerte a la Codesal, al retacearle el apoyo económico que necesitaba. "Como yo venía reclamando que no podía seguir bancando la Codesal, me pagan 6 meses de contrato, que eran del 2014, me lo pagan recién en el 2015, un año después de vencidos los contratos y de que yo ya los había pagado", contó.

Al describir los cortocircuitos con Paraná, Mazurier apeló a una frase ambigua, en la que dio a entender que tuvo que apartarse de las reglas administrativas. "Siempre ha habido un problema con Paraná, porque nosotros no seguíamos las cuestiones exactas como ellos tienen, porque es un organismo distinto. No tienen ellos un organismo que se maneje como la Codesal, por eso era tan complicado cualquier cosa. Y si yo seguía los parámetros de ellos, eeeeh, iba a quedar en una parálisis total y no iba a poder manejar absolutamente nada, y lo que yo quería era hacer. Por suerte pude hacer, pude hacer las termas, dos termas. En realidad pretendía que después se me felicite por la tarea realizada y no que esté acá en el banquillo como acusado. Pero bueno, así es la vida".

Alguien está cortando cañas en el Perilago


Luis Mazurier sorprendió al juez y al fiscal con dos historias, que, a su entender, transparentan los cortocircuitos con el gobierno provincial anterior.

"En un momento empiezan a cortar cañas en el Perilago. ¿Quién ordenó eso? Me corro hasta allá y pregunto: ¿quiénes son estos tipos que están cortando cañas? Me dicen 'mirá, dijeron que la orden era del Fiscal General de la Nación'. ¿Qué tiene que ver el Fiscal General de la Nación con esto? Entonces, ¿qué hago yo? Llamo a la Fiscalía y le digo que quiero hacer una denuncia porque están cortando cañas y que los identifiquen. Mandan un delegado judicial, entrevista a la gente, las identifican, no se sabía quiénes eran porque los tipos cortaban rápidamente cañas pero no sabían expresar bien cómo era que estaban ahí. ¿Y qué era lo que había pasado? Resulta que esas cañas eran para un tipo que estaba en Larroque, que estaba haciendo una plantación de cañas, no sé qué. ¿Qué había pasado? A mí no me habían avisado absolutamente nada. Es decir, ¿quién tenía que avisarme? Algún empleado del gobernador decir 'mirá, van a cortar unas cañas para llevarlas a hacer no sé qué cosas'".

"¿Qué pasó con eso? Me mandan urgente en un fax -siguió contando Mazurier- diciéndome que a eso lo había autorizado el gobernador y me manda una carta urgente el Fiscal de Estado diciéndome que estaba autorizado el corte de cañas. Entonces yo me presento a la Fiscalía y le digo esto fue un mal entendido, realmente voy a levantar la denuncia, pero a mí no me avisaron".

El otro episodio fue el de la ambulancia secuestrada.

"No me pueden secuestrar una ambulancia, que era mía y que yo la ponía a disposición de la Codesal, pero no cobraba absolutamente un peso por eso. La ponía a disposición de la Codesal porque, si no, teníamos que tener una ambulancia privada que no podíamos pagar porque no teníamos fondos en la Codesal. Y me la secuestra el mismo Estado", reprochó Mazurier.

Según el exfuncionario, es verdad que había un pedido de secuestro para un vehículo con la misma patente que la ambulancia, pero lo que buscaban en realidad era "un semi remolque" y el papel tenía un sello que decía "sujeto a verificación".

A su entender "hubo algo de mala leche" en el procedimiento policial. "Yo lo que terminé haciendo es una denuncia penal contra Mendoza (el Comisario Mendoza, ex Jefe de Policía de Concordia) porque Mendoza estaba enterado de la cuestión. Había un problema ahí de. . . no sé, había fricciones, con lo cual no permitía que se hagan normalmente las cosas. . ."

Paraná tenía la culpa


Con el relato de estas tiranteces con el gobierno provincial de entonces, Mazurier procura culpar "a Paraná" por el ahogo económico que según él padecía el organismo y por requerírsele el cumplimento de normas administrativas que -en su opinión- no serían aplicables a un ente de características especiales como la Codesal.

Se esforzó incluso por invalidar las observaciones que recibiera del Tribunal de Cuentas: "Es fácil decir 'hay que hacer así, asá', pero no están en el lugar, no saben, no tienen el conocimiento. Por eso yo agarré y le mandé una nota y a eso lo vamos a probar porque esa nota está en un expediente que me entregaron a mí en la Fiscalía de Estado, donde yo decía que los organismos que intervienen en la cuestión de la Codesal tenemos que reunirnos en Concordia y ver qué es lo que se administra y cómo se administra, porque en Paraná no hay ningún otro organismo que sea igual que este".

Mazurier pedirá a la Justicia que se comparen los giros de dinero que recibió desde Paraná la Codesal cuando él era presidente y los fondos enviados durante la gestión de José Luis Ostrovsky. Está convencido de que las abismales diferencias le servirán para probar que todo lo que se recaudaba en las termas y en la Tortuga Alegre no alcanzaba para sostener las actividades del organismo.

"Ahora los contratos se aprueban rápidamente y el corte de pasto que nosotros hacíamos con gente que era de la Codesal sale 544.000 pesos por mes. Ha habido aumento de presupuesto. Primero de 2 millones, todo en un solo ejercicio, después de 8 millones. Es decir, tenemos un gasto de 16, 18 millones de pesos y, si nosotros lo comparamos con lo anterior, nos damos cuenta de que ellos tienen ingresos y tienen más ingresos que nosotros porque lo primero que hicieron cuando fueron a administrar es aumentar todos los valores de las entradas a las termas, por ejemplo", argumentó Mazurier.

"Mi pareja administraba el hotel Ayuí"


Luis Mazurier reiteró ante el Juez Alberto Funes Palacios los mismos argumentos que usó en la anterior audiencia con el juez Perroud, para negar que se haya apoderado del Hotel Ayuí. Se esmeró por reafirmar que el Hotel nunca pasó a manos de la provincia de Entre Ríos y, por tanto, jamás dependió de la Codesal: "Tengo el conocimiento pleno que la provincia de Entre Ríos, como lo ha dicho mi defensor y como lo expliqué en la audiencia anterior, no recibió el hotel. ¿Por qué no lo recibió? Porque había que hacer un inventario. El hotel es un inmueble con muebles adentro, colchones, camas, lo que cualquier hotel cuenta. No se hizo ningún inventario".

"El señor Niez ha querido que la provincia de Entre Ríos le devuelva el hotel, cuando solamente en los papeles dice que el hotel pasaría automáticamente a la provincia de Entre Ríos. Era una cuestión automática pero requería de otro proceso, es decir, es automática pero 'a ver qué me entregás'. Y tampoco era conmigo la cuestión. Si en la época en que se firma el convenio entre la CTM y el superior gobierno de Entre Ríos la Codesal ni siquiera existía, ¿por qué me pone a mí como el responsable de recibir el hotel?", se defendió.

Ante el peso de las evidencias, Mazurier optó por admitir que el hotel es gerenciado por su pareja, Cintia del Rosario Mengeon, aunque le quitó toda relevancia como prueba de que se apropió del Ayuí.

"Yo le aseguro -dijo Mazurier al Juez, que el 99,99 por ciento de esta causa es falsa. Nada es cierto. Todo es un invento donde se toman testimonios de personas que dicen que yo iba al hotel, que me quedaba afuera. Claro, iba con mi pareja (por Cintia Mengeón). Mi pareja estaba, sí, administrando el hotel. Yo iba a esperarla. ¿Qué me iba a meter adentro? Esperaba que saliera y me venía".
Fuente: El Entre Ríos

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